En el campo administrativo se conoce como escritura pública aquel documento que concede respaldo legal a actos diferentes de la vida civil. Se encuentra presente en actos tan importantes como la adquisición de una casa o la formación de una sociedad anónima. Es una herramienta notariada que deja constancia legal a través de la firma de un contrato o acto jurídico.
Los notarios utilizan la escritura para autenticar aquellos eventos que se llevan a cabo entre dos o más partes comprendidas, ofreciendo carácter público a un escrito que, de otra manera, se delimitaría al ámbito privado. ¿Y cuáles son las instrucciones que la demandan? Entre las más frecuentes se encuentran la compraventa de bienes raíces, cláusula de hipotecas, transferencia de herencias y formación de empresas.
Si deseas invertir en una propiedad, es de vital importancia que sepas cómo trabaja la escritura pública en su país correspondiente. Esto te permitirá establecer un orden de la documentación precisa para comprar tu próximo inmueble, bien sea en proyectos pequeños o grandes.
¿Para qué funciona una escritura pública?
De forma general, este documento tiene una o más afirmaciones de las partes comprendidas en el contrato. Detalla el estado de la transacción, a qué se obliga cada uno de los partícipes y las reglas a las que deben comprometerse. Debe ser suscripto por todos los implicados, tomando en cuenta al notario, quien da certeza del contrato o hecho jurídico en cuestión.
La escritura pública debe cumplir diferentes funciones, entre ellas:
- Sirve como respaldo legal que autentique que se ha realizado un específico contrato.
- Ofrecer tranquilidad a los copartícipes durante la transacción.
- Certificar que las gestiones se van cumpliendo respetando todas las medidas legales vigentes.
- Reconocer que las gestiones acordadas se lleven a cabo sin tener que someter a otras pruebas.
- Proteger la voluntad de los partícipes de la transacción, sin que consiga ser discutida o cambiada por terceros.
Diferencias entre escritura privada y pública
Existen diferencias entre una escritura privada y la pública. Por ejemplo, la segunda está a disposición de cualquier individuo que quiera consultarla. Es decir, que si una persona quiere conseguir información sobre un inmueble que está en venta, puede asistir a una notaría y leer la escritura de la propiedad. En cabio la escritura privada permanece exclusivamente a disposición de las partes comprendidas dentro del contrato.
Además, los documentos de carácter privado no logran ser registrados en ningún centro oficial, la propiedad es un ejemplo de ello. Aunque las escrituras públicas necesita de una entrega inmediata en entidades gubernamentales y de medio público.