En el arreglo de una novia, todo es importante, pero las joyas tienen un sitial especial.
Las joyas son las encargadas de aportar lujo y sofisticación a un atuendo que debe ser sobrio. Se trata de elegir las piezas correctas que reflejen la personalidad y realzen los atributos de la novia.
El anillo de compromiso
Los anillos de compromiso se usan desde mucho antes de la boda, pero no deja de ser el centro de atención ese día. También se le considera como parte del ajuar de joyas de la novia.
Un anillo de compromiso debe ser una pieza de arte, con un diseño muy bien cuidado y con las piedras que se elijan para esta importante joya.
Por ejemplo, un anillo de esmeralda y diamantes es una excelente elección. La esmeralda es una piedra de color inconfundible que destaca con mucha elegancia y sofisticación. La esmeralda ubicada al centro, rodeada de diamantes que le imprimen un carácter muy especial, es la descripción más sencilla para esta joya.
El zafiro de talla pera es una elección llena de intensidad. Este anillo está diseñado con 2 diamantes que escoltan al zafiro para realzar su brillo y darle marco a la piedra.
Pendientes
Los pendientes de boda son muy importantes en el arreglo de la nueva y deben ser elegidos con cuidado. Los pendientes son los encargados de enmarcar el rostro y deben ir en concordancia con el peinado, el maquillaje y los demás elementos. Hay que tomar en cuenta que los pendientes van a protagonizar todas las fotos.
Los pendientes de diamantes redondos aportan mucho brillo a la novia, son perfectos para una boda nocturna o al final de la tarde. Se complementa con una piedra que cuelga, puede ser un zafiro o una esmeralda.
Si se desea algo más tradicional, unos pendientes de diamante en un diseño minimalista es la respuesta.
La combinación de diamantes y perlas es muy apreciada en unos pendientes. Por ejemplo, un colgante, terminado en una perla que protagonice el conjunto, es lo mejor.
Colgantes
Un colgante es una de las joyas para novias que hace destacar el cuello y el escote, es necesario que se combinen muy bien con los pendientes y con el resto de los elementos, ya que todo debe armonizar.
Un colgante de diamante con cadena es una elección muy apropiada. El colgante muy pequeño resalta con su brillo, pero mantiene la elegancia con su tamaño. Es una elección perfecta si el vestido deja el cuello al descubierto y no se quiere desviar demasiado la atención.
Una pulsera es otra joya que se puede elegir para complementar el arreglo de la novia. Una pulsera de diamantes tipo cadena, le brindará un punto focal diferente a la novia. Además, puede hacer juego con otros elementos del arreglo.
Un broche de diamantes puede ser un elemento que puntualice el vestido. Puede colocarse en el escote o en la cintura, sobre todo si hay un cinto o lazo en esas zonas.
¿Cómo combinar todas las joyas?
Antes de acudir a las joyerías en Valencia a por las joyas para la novia, hay que decidir cuáles va a usar. Lo único imprescindible son los pendientes y el anillo de compromiso, dependiendo del tipo de boda y del diseño del vestido, se pueden elegir el resto de las joyas.
Los pendientes y el colgante de cuello se roban el protagonismo, así que no hay que exagerar con esas joyas. Si los pendientes son muy grandes o muy largos, es mejor elegir un colgante muy discreto.
Una pulsera nunca está de más, a menos que el vestido sea de manga larga, elige una que aporte brillo y que tenga algún diseño que llame la atención.
Otros elementos pueden ser las tiaras de novia o los adornos del tocado, que imprimen un aire de realeza al evento.
Lo más importante es que la novia luzca radiante con las joyas que haya elegido para tan especial ocasión.