¿Te acabas de hacer un piercing y tienes miedo de que se te infecte? O peor aún, tienes una semana con tu piercing nuevo y estás notando ciertas molestias, por lo que quieres saber si se te ha infectado. Pues no te preocupes, en este artículo te explicaremos qué síntomas se muestran, para que puedas saber si tu piercing está infectado, y que así tomes medidas lo más rápido posible; porque como sabes, las infecciones avanzan bastante rápido, por lo que puede incluso llegar a peligrar tu vida.
Síntomas Cuando un Piercing está Infectado
Debes tener presente que los piercing que son hechos de forma casera tienen muchas más probabilidades de acabar infectados; muchas veces por falta de higiene y esterilización y porque no se cuentan con los implementos necesarios; por lo que te recomiendo que acudas a los especialistas en la materia si decides hacerte uno. Por otro lado, los piercing hechos en zonas como la oreja, el ombligo, la lengua y los genitales usualmente se infectan más.
Con eso dicho, debes saber que el enrojecimiento y la hinchazón son algo normal los primeros 2 o 3 días, debido al maltrato al que has expuesto tu piel; sin embargo, cuando ambos duran más de ese tiempo, debes empezar a estar atento a otros síntomas que puedan mostrar que tu piercing está infectado. A continuación te nombramos algunos:
Enrojecimiento Excesivo
Si ves que el color rosa que tenías al principio se está tornando cada vez más rojo y se va expandiendo, es posible que sea por una infección. Así que vigílalo bien.
Inflamación Excesiva
Al cabo de unos 3 días la inflamación debería empezar a disminuir, pero si más bien empeora, no es una buena señal. De hecho, podría ser muy incómodo, por ejemplo, si tu piercing está en la lengua y debido a la inflamación se te hace difícil hablar, comer y moverla.
Mucho Dolor
Aunque es normal al principio que la zona te duela por la perforación, también debería disminuir a los 2 o 3 días. Pero no es bueno que empeore, que se expanda ni que te duela con apenas rozarlo.
Notas la Zona Caliente
Si sientes la piel caliente, debes prestar mucha atención. Normalmente este síntoma está acompañado por los 3 anteriores, por lo que esta combinación puede indicarte que tu piercing está infectado.
El Temido Pus
Este es el síntoma que más tememos y que nos confirma rotundamente la existencia de una infección ante cualquier herida, incluidos los piercing. No confundas el pus con el líquido linfático, el cual es una secreción un algo blanca o incluso transparente que tu cuerpo segrega un poco para sanar y cicatrizar la herida; mientras que el pus es más espeso, también puede ser de color blanco (que indica una infección leve) o de color amarillento o verdoso (que indica una infección más seria); el pus puede incluso generar mal olor.
Fiebre
Este síntoma es una señal mucho más preocupante que el pus, pues muestra que la infección se ha esparcido por tu cuerpo; puede estar acompañada de náuseas y escalofríos. Ante estos síntomas acude de inmediato a tu médico.
Ante todos estos síntomas, lo mejor que puedes hacer (aparte de acudir al médico, como te acabamos de decir) es aprender cuanto antes a curar un piercing infectado, para que puedas tomar las medidas pertinentes y evites que la infección pase a mayores.
Aunque siempre es mejor evitar este tipo de problemas tan desagradables; por eso, lo ideal es que, de hacerte un piercing, lo hagas en un centro especializado donde veas que tienen las medidas de higiene necesarias; luego, extrema el cuidado para que no se te infecte.