Todos desearíamos que hubiera una cura para distintos tipos de enfermedades. Sin embargo, aunque las plantas no son capaces de curar por completo todas las enfermedades que existen, hay una que tiene propiedades muy buenas. En este caso, se trata del Aloe Vera. Es por ello que, en este artículo, estaremos analizando cuáles son sus propiedades y cómo puede beneficiarte personalmente.
¿Qué es el Aloe Vera?
También conocida como sábila, acíbar y muchos otros nombres, esta es una de las 250 especies de aloe que se conocen en la actualidad. Generalmente, suele encontrarse en zonas desérticas o semi desérticas. Esto, debido a que se adapta tanto al clima, como a las condiciones necesarias para su crecimiento. Y está compuesta de un grupo de hojas que surgen del tallo, de las cuales, sale una sustancia que se usa en muchos aspectos.
Esta es una planta que cuenta con una incontable cantidad de beneficios, los cuales se dividen en muchas facetas. En algunos casos, suele utilizarse en tratamientos. Pero, debemos destacar que es de suma importancia recordar que todos los tratamientos deben consultarse previamente con un profesional de la salud. Por otra parte, a partir de esta planta se han creado algunos productos, tales como jabones, cápsulas de aloe vera y muchos otros.
Beneficios que aporta el Aloe Vera
Uno de los aportes que puede hacer el Aloe Vera, es que permite normalizar el PH que se encuentra en el aparato digestivo. De esta manera, evita la formación de úlceras, o una digestión más lenta. Hay quienes utilizan un poco de su gel y lo frotan sobre el punto de dolor en la cabeza a fin de que desaparezcan las molestias.
A su vez, hay algunos expertos que recomiendan la inhalación de los vapores de agua hirviendo de las hojas de esta planta. De esta forma, se puede lograr una mejora en la respiración de las personas que padecen de algunas enfermedades, tales como el asma o la bronquitis. En algunos casos, también suele implementarse con la finalidad de aliviar los indicios que la artritis y la artrosis suelen provocar.
Podría decirse que una de las mayores aplicaciones que se le suele dar al Aloe, es en la piel. Esto se debe a que tiene un alto contenido en aminoácidos. Y gracias a esto, logra realizar una limpieza profunda en las distintas capas de la piel. En este aspecto, hay diversos usos que suele dársele, algunos ejemplos de ello, son:
Para prevenir el acné:
Este tratamiento resulta ser muy efectivo, ya que efectúa una regeneración de los tejidos desde dentro hacia afuera. Sin embargo, los expertos en este campo, recomiendan que la persona con acné se lave bien la cara con agua y jabón por la mañana y por la noche.
En el cabello:
El cabello es una zona que tiende a padecer resequedad, caspa, e incluso, caída. No obstante, al aplicar un tratamiento de aloe en el cabello, quien es rico en vitaminas y minerales, los folículos capilares pueden rejuvenecerse.
En las heridas:
Esta planta se ha consolidado como uno de los mayores regeneradores a nivel celular. Esto se debe, a que posee gran cantidad de alantoína. De esta forma, al aplicar su uso, una herida puede sanar mucho más rápido que cuando no se efectúa el tratamiento.
Como hemos visto hasta ahora, el Aloe Vera es una planta medicinal muy práctica en muchos aspectos. De manera que vale la pena utilizarla en cualquier situación, siempre y cuando, el tratamiento que efectuemos esté respaldado por un médico. Si así lo hacemos, podremos disfrutar de sus incontables beneficios.