En realidad pocas personas saben comprar de forma inteligente, suelen comprar artículos que no necesitan, o a un precio muy elevado por desinformación o terminan por adquirir algo que no es de la calidad que estaban buscando. Para desenvolverse mejor en el medio existen estos pequeños trucos muy útiles.
Aprovechar las ofertas
Esto aplica para todas las compras, ya sea en tiendas físicas u online. De vez en cuando las tiendas sacan ofertas de algunos productos para tener una rotación más rápida de inventario, ya sea porque quieren hacer una campaña publicitaria o porque están buscando deshacerse del inventario viejo que les ocupa espacio pero sin tener demasiadas pérdidas.
Sin embargo, no vale únicamente con buscar los productos más baratos que consigas. También deben ser de buena calidad, es decir, unos chollazos. Es completamente inútil conseguir cualquier producto a un precio inferior a la media pero que tendrás que reponer en muy poco tiempo. Esto es a lo que se refiere el dicho “lo barato sale caro”.
Los chollazos son la mejor alternativa que tienes para hacer una buena compra. Evidentemente, ahorrarás algo de dinero en el momento de la compra, y también al sacarle provecho a un producto que vas a utilizar constantemente y que no se va a desgastar antes de tiempo. No siempre son las ofertas más económicas, pero a medio plazo, son la mejor alternativa.
Nada de esto significa que debas rebuscar entre un millar de tiendas online hasta conseguir la opción que más te convenga. Esto sería un gasto demasiado grande de tiempo y esfuerzo que casi nunca valdrá la pena. Por suerte, algunas páginas web recopilan la información de algunos productos procedentes de proveedores grandes, lo que es perfecto para hacer una buena compra.
El día también influye
Dependiendo del día de la semana, algunas tiendas buscan captar la atención de los usuarios de internet para que compren más, porque es cuando suele haber un mayor flujo de visitantes. Por ejemplo, los artículos de tecnología se suelen vender más baratos los lunes porque es el día en el que los fabricantes se encargan de los reembolsos.
Por lo que buscar lo último en tecnología no siempre cuesta un ojo de la cara. En el caso de que quieras un mini PC Windows 10, puedes buscarlo en las tiendas más grandes los lunes, o también revisar las ofertas de las webs que hacen un catálogo con las mejores ofertas. Mezclar ambos trucos es una excelente estrategia.
Aunque en el caso de la tecnología no es tan simple como parece porque debes conocer de antemano cuál es el uso que le vas a dar al artículo y cuál es tu presupuesto. En el caso de estos mini PC deberás comprobar que las especificaciones sean suficientes para lo que vayas a hacer.
El líneas generales son equipos de potencia media que sirven para hacer todo el trabajo de ofimática y jugar con la mayoría de juegos que no sean de última generación. Suelen tener 4GB de RAM y 64GB o 128GB de SSD. Se usan sobre todo en oficinas en las que haya varios empleados o por las personas que desean tener un equipo que puedan usar en varios sitios a un precio razonable.
Investiga y compara antes comprar
Antes de comprar cualquier producto debes saber qué es lo que vas a adquirir. Lo mejor es leer acerca del producto que quieres comprar y ver si efectivamente te va a servir. Para ello puedes visitar blogs en los que hagan reseñas, y consultar los comentarios de los compradores anteriores.
Es importante que no te guíes únicamente por la información de los fabricantes, sino que también busques información de otras fuentes. Normalmente estos medios son más acertados, porque dan una opinión más objetiva acerca del artículo que quieres comprar. Así que el truco estará en ver un poco en todos lados hasta tener una opinión sólida.