La Costa del Sol se ha convertido en los últimos años en un refugio para los habitantes de países escandinavos, que han encontrado en las playas del litoral andaluz el sitio ideal para ir de vacaciones y hasta para establecerse. Suecos, finlandeses, noruegos y daneses aman la costa malagueña, de por sí, uno de los principales destinos turísticos de España.
Los nórdicos acuden a esta zona por su agradable clima, que ofrece más de 300 días del año con sol y una temperatura promedio de 19°C, activando el sector del turismo y generando ingresos importantes al sector hotelero, inmobiliario, y a las empresas de servicios de esta región de Andalucía.
Comunicarse en su idioma
Desde hace varios años, Málaga tiene una alta demanda de turistas provenientes de Dinamarca, Noruega, Finlandia y Suecia, que eligen esta zona muy por encima del promedio del resto de los destinos de España. La Costa del Sol se ha convertido en el lugar preferido para ir de vacaciones para la comunidad escandinava.
Miles de personas provenientes de Dinamarca, por citar uno de estos países, visitan con frecuencia esta parte de España, disfrutando de los espacios, servicios y locales, por lo que la demanda de información en danés, por ejemplo, es muy alta. Es esencial que hoteles, restaurantes y Pymes se esfuercen en ofrecerles información turística, catálogos y otras publicaciones de interés, traducidas a su idioma.
Desde 2016 ha aumentado la cantidad de vuelos con pasajeros daneses que buscan en estas playas del Mediterráneo español, el lugar perfecto para descansar y alejarse del frío. Destaca también que existe un boom exponencial de la presencia de grandes grupos de escandinavos que eligen quedarse a vivir en la Costa del Sol.
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), para el inicio de 2020 se estimaba que en Málaga estaban radicados 269.792 extranjeros, entre ellos 6.774 son finlandeses, 6.570 son suecos, 4.048 daneses y 2.502 noruegos.
Los finlandeses encontraron su nicho
La comunidad europea finlandesa es la que más está creciendo en Málaga. Gran parte se ha establecido en el municipio de Fuengirola, donde está asentada la colonia de Finlandia más grande del mundo, después de la ubicada en Suecia. Ofrecer información traducida en finlandés es algo fundamental para atraer a los turistas y residentes de esa comunidad a los negocios de esta zona andaluza.
La historia de este amor nórdico hacia Fuengirola empezó cuando en la década de los 70 del pasado siglo, atletas finlandeses de alta competición establecieron su centro de entrenamiento en esta zona española para aprovechar su clima ideal y huir del crudo invierno de su país de origen, con excelentes resultados traducidos en medallas de oro.
Otros proyectos de origen se han cristalizado en estas tierras de Andalucía, desde fundaciones culturales, hasta empresas que ofrecen servicios de atención técnica a empresas escandinavas, como el caso de Barona con más de 500 empleados en Fuengirola, y que cuenta con cientos de finlandeses ubicados en Málaga, pero que resuelven y ofrecen asesoría técnica a empresas de servicios como electricidad, de salud o tecnología, ubicados en Finlandia.
Un pedazo de Suecia en Marbella
Para trabajar solo requieren una buena conexión de internet personal que hable, finlandés o sueco, y eso abunda en esta zona, según señalan las cifras oficiales, pero también la gran cantidad de escandinavos que están en las calles andaluzas a diario.
La colonia de Suecia en esta zona de España no se queda muy atrás, en este litoral hay más de seis mil suecos que viven, trabajan o pasan gran parte del año. Hay empresas suecas que también se han establecido en esta área, como el caso de Call4u, que tiene su centro de atención a usuarios de su país y otros de Europa desde Marbella.
También funciona Webhelp en Benalmádena, con más de 400 trabajadores que básicamente ofrecen atención a varios países de idiomas escandinavos, y otros, como francés, inglés o italiano.
Estas empresas que funcionan en la Costa del Sol aprovechan ese anhelo de los nórdicos en vivir cerca de paradisíacas playas, con un clima agradable y lejos de las inclemencias del frío que los rodean, ahorrando en costes de funcionamiento y pago de personal, pues el salario en España es inferior que en sus países.
La unión de intereses económicos, la fascinación de los nórdicos por su paisaje y su clima, ha facilitado que la Costa Sol se haya convertido en albergue de empresas que centralizan la atención para los países escandinavos.
Sentirse como en casa
Todas las personas que forman parte de las colonias nórdicas hacen su vida en España, acuden a los restaurantes, sitios turísticos o de servicios, y necesitan ayuda para entender y hacerse entender. De ahí que sea esencial que los prestadores de servicio ofrezcan información en noruego o danés, o tengan la facilidad de traducir rápidamente con el fin de brindar una atención de calidad.
Es esencial que tanto los visitantes como los residentes extranjeros, temporales o permanentes, se sientan bien recibidos en esta zona, pues su presencia contribuye y contribuirá al desarrollo económico y cultural.
La multiculturalidad de la Costa Sol la convierte en escenario, además, de una veintena de centros educativos extranjeros, incluyendo a estos países escandinavos. Los niños y adolescentes reciben el programa educativo de su país de origen, para garantizar que al momento de volver a su país de origen puedan integrarse sin problemas al sistema educativo que les espera, sin embargo, reciben formación que les podrá servir para integrarse a la vida de España.
Todo parece indicar que esta tendencia de los turistas nórdicos de elegir la zona costera de Málaga para hacer turismo, lejos de disminuir, irá en aumento, pues con el paso del tiempo se están creando oportunidades de inversión y de desarrollo laboral para vivir y disfrutar del paraíso del Mediterráneo sin perder contacto con sus raíces.