Durante el verano y el invierno contamos con unas temperaturas muy elevadas o muy bajas que debemos controlar para nuestra comodidad en el hogar o en nuestro negocio, e incluso por cuidados de nuestra salud, ya que ambos extremos de temperaturas pueden suponer diversas enfermedades, como una bronquitis en el caso del frío; o sofoco y ansiedad en el caso de estar expuesto durante mucho tiempo a temperaturas muy elevadas.
La educación del espacio es fundamental y por eso debemos contar con unas instalaciones adaptadas según nuestras necesidades. Veamos a continuación cuáles son dos de los métodos más habituales y efectivos para mantener nuestro hogar en una temperatura agradable durante todo el año: el aire acondicionado y las calderas de gas.
Las ventajas de los aparatos de aire acondicionado
El aire acondicionado es un aparato cuya función principal es mantener un clima óptimo en las instalaciones donde se encuentran estos sistemas. Dependiendo del tamaño de las habitaciones y de la intensidad de las temperaturas que alcanzan en condiciones normales, se deben elegir aires tipo splits de mayor o menor potencia.
Esto lo averiguamos realizando un cálculo rápido: multiplicamos el largo de la habitación, por el ancho y por la altura entre el suelo y el techo. Con este resultado realizamos otra multiplicación: multiplicamos por 40 si la temperatura de la habitación es moderada y por 60 si es una temperatura muy alta. Si el resultado no es mayor de 2000, será suficiente adquirir un split de 2.000 frigorías, si lo supera, es necesario un split de 3.000 frigorías.
Estos dispositivos cuentan con una tecnología de ajuste automático donde tan solo tendrás que programar cuál quieres que sea la temperatura de la habitación y cuando esta se alcance, el dispositivo dejará de funcionar al detectarla con unos termostatos que, en caso de volver a desequilibrar la temperatura deseada y la temperatura en la que nos encontramos, darán orden al dispositivo de volver a activarse y arreglarlo de nuevo.
Además, actualmente la mayoría de los aparatos de aire acondicionado cuentan con programa de calentamiento, por lo que también son útiles para el invierno o los días más fríos entre estaciones.
Hay que tener en cuenta que los aires acondicionados no pueden ser instalados por cualquier electricista y mucho menos por nosotros mismos, sino por un instalador con un NIF o una empresa con CIF habilitada, ya que debe quedar registrada su instalación en el Registro Integrado Industrial del Ministerio de Industria.
Por qué elegir calderas de gas
Para combatir las bajas temperaturas del invierno, la mejor opción son las calderas de gas. La principal ventaja de tener una es la universalidad de servicios de calefacción que ofrecen en el hogar. Principalmente, ofrecen dos servicios: calentamiento del hogar mediante sistema de radiadores y calentamiento de agua en la cocina y baños.
A la hora de calentar nuestro hogar, hemos visto la opción de utilizar aires acondicionados que cuentan con programas de calentamiento. Sin embargo, si no cuentas con estos dispositivos, puedes recurrir a las calderas y los sistemas de radiadores. Por norma general, todas las habitaciones de los hogares están acondicionadas con radiadores a excepción de pasillos y entradas de las viviendas, donde no suele ser habitual.
Otra ventaja de las calderas de gas es que ofrecen una cantidad ilimitada de agua caliente continua, ya que su función consiste en el calentamiento del agua a petición del modo en que regulamos nuestros grifos. Por el contrario, los termos de agua son aparatos de almacenamiento que cuentan con una cantidad limitada de agua caliente que al acabarse, hay que esperar durante largos periodos de tiempo a que se rellenen de agua y se calienten.
Estos son los dos sistemas principales y más efectivos para regular la temperatura de nuestro hogar y que nos aseguran una gran comodidad. Sea para el calor o para el frío, para mantener la temperatura de nuestras habitaciones o para usar un sistema de agua caliente, no dudes en mantener la instalación de tu hogar con los mejores dispositivos.