La practicidad, portabilidad y potencial margen de ganancias de las criptomonedas le han convertido en un tema de conversación en distintos campos, como en los que buscan la libertad financiera y viajar, tal como sucede en el portal Quiero Ser Libre, donde elaboran resúmenes, consejos y listados completos sobre soluciones de seguridad y privacidad de criptomonedas.
Precisamente, para entender cómo cuidarlas y tenerlas siempre a buen resguardo, conviene entender cómo funcionan.
Sobre las criptomonedas
En la actualidad existen cientos de criptomonedas, y eso sin contar los tokens de uso interno de muchas plataformas, que si bien no tienen valor comercial, sí tienen valor de intercambio por dinero real o criptomonedas con valor comercial. No obstante, la criptomoneda más popular y también la primera, es Bitcoin, sirviendo de ejemplo para entender cómo funcionan.
Qué es bitcoin y cuál es su funcionamiento es lo primero que debe saberse, más que nada, para entender qué se puede hacer por sentido común y por hábitos financieros saludables para cuidar el dinero.
Bitcoin es una criptomoneda que busca ser una alternativa al sistema bancario, funcionando al margen de este, donde cada persona se convierta en su propio banco, y donde solo se necesite una dirección de billetera para enviar y recibir, algo que hoy es tan sencillo como crear una cuenta en una billetera, comprar una en físico, y así otras alternativas.
La popularidad de Bitcoin, y en la actualidad de decenas de criptomonedas, hace que sean un bien preciado y de alto valor, por lo que cada vez existen más interesados, pero también más riesgos en caso de perder el acceso, olvidar los datos o sufrir robos. Por privacidad y seguridad, lo elemental es escoger las mejores billeteras para garantizar que todo siempre funcione bien.
Las billeteras y sus tipos
No hay una sola clase de billeteras de criptomonedas. De hecho, al hablar de los tipos de billeteras de bitcoin y otros activos criptográficos se debe hacer mención a tipos que van desde los monederos en papel -hoy no tan usados, pero quizá los más seguros-, hasta los más conocidos y utilizados, que se mencionan a continuación.
Exchanges
Cuando se crea una cuenta en una casa de intercambio de criptomonedas, automáticamente se crea también una wallet para guardar los fondos. Desde luego, están seguros y hasta respaldados porque los mejores exchanges tienen respaldos legales en caso de quiebra o pérdidas, pero la privacidad no lo está tanto, ya que suelen pedir datos personales para crear las cuentas, algo que a muchos usuarios no les hace ninguna gracia, porque desde luego, va en contra del origen filosófico de las criptomonedas, de buscar un bien financiero lejos de los bancos, de las restricciones, proporcionando privacidad y anonimato.
Mediante extensiones de navegador, programas de ordenador o aplicaciones móviles, hay decenas de billeteras que garantizan mayor privacidad y mejor seguridad.
Sin embargo, se sigue estando a merced de un tercero -la empresa que proporciona el software- y se necesita respaldar bien la información de claves públicas y datos de respaldo, puesto que sin ellos será imposible recuperar los fondos o ingresar a la wallet en caso de un problema. En ese caso, sí, el usuario se convierte en su propio banco, con las ventajas y riesgos que eso puede tener.
Wallets en hardware
Finalmente, están las billeteras en hardware, donde Bitbox02, el monedero de hardware más seguro, parte con ventaja y sirve como ejemplo para hablar de los mismos.
Un monedero en hardware se parece mucho, estéticamente, a una unidad de almacenamiento USB o un pendrive. Dentro, está la información criptográfica asociada a un monedero y, al ser los monederos direcciones públicas de una cadena de blockchain, también está la información sobre sus fondos.
Lo mejor de estos monederos es que no se pueden hackear, no pierden la información, no bloquean la cuenta, no piden datos KYC, y por ello son la mejor solución para seguridad y para privacidad, siendo una de las recomendaciones habituales para las personas que quieren tomarse en serio invertir o ahorrar en criptomonedas.