La mayoría de los chistes crueles y con mucha picardía, hacen referencia a la relación con la suegra; incluso, hay quienes consideran que es una regla los problemas con ella; sin embargo, cuando iniciamos una relación amorosa con una persona, también iniciamos una relación con su familia, por lo que sería ideal tener una sana convivencia. Para ayudarte en esta etapa, te daremos una serie de consejos para llevarse bien con la suegra.
El Origen del Problema
Una madre suele ser considerada el ser más valioso, querido y respetado para las personas; por eso para muchas parejas, es un verdadero reto romper ese vínculo con ella para iniciar una relación amorosa; incluso algunos pueden sentir que dejan de ser buenos hijos, por ser buenos esposos.
Para ambos padres, es difícil ver como la persona a quien han cuidado tanto y por quien muchas veces se han sacrificado, ahora inicie una nueva vida sin ellos; también hay familias muy unidas que se han acostumbrado a tratar todos los temas abiertamente; y puede que el hijo casado siga recurriendo a su familia para tomar decisiones importantes, en vez de acudir a su pareja.
Así que allí comienza a existir una fricción milenaria, que en algunos casos ha llegado a ser tan fuerte que puede hasta romper con un matrimonio o relación de pareja. Inician los celos, las comparaciones, discusiones sin parar y se hace verdaderamente insoportable la relación con los suegros.
Sugerencias para Llevarse bien con la Suegra
Ahora bien, si te has sentido identificado con algunas de las situaciones mencionadas anteriormente, no todo está perdido; te daremos algunas sugerencias para que puedas mejorar tu relación con los suegros.
Sé Objetivo
Cuando ya estamos predispuestos a una situación, puede que perdamos la objetividad; por eso es bueno que te hagas un autoexamen para determinar si existe la posibilidad que estés exagerando la situación; también puede ser que la manera como te han criado influye en como ves las cosas; por ejemplo, puede que te cueste entender la relación de tu pareja con sus padres porque la tuya con tus padres no es igual; así que incluso en el fondo, puedes estar desarrollando celos por esa relación familiar que no tienes.
De seguro es muy difícil hacernos este autoexamen; pero debes ser honesto contigo mismo y esforzarte por ser objetivo; además, si discutes demasiado con tu pareja por el tema de los suegros, pudiera ser que la raíz del problema sea otro en realidad.
Aprende a Ceder
Aunque es cierto que no siempre vamos a estar de acuerdo en todo, debemos esforzarnos por ser razonables y saber cuando ceder; trata de entender los sentimientos de tu pareja y ponerte en su lugar. Si le impides a tu pareja acercarse a su familia, terminarás creando heridas que tarde o temprano afectarán tu matrimonio; la familia siempre va a ocupar una parte fundamental de la persona y eso no lo debemos cambiar.
Expresa tus Sentimientos con Respeto
También es cierto que el matrimonio es una unión que debe respetarse y considerarse; es importante que los esposos expresen con sinceridad como les ha afectado la relación con los suegros en su matrimonio; pero deben ser respetuosos al hablar, recuerda que están hablando de sus familias, por lo que es algo valioso e importante. Solo así lograrán comprender de verdad si se han visto afectados como pareja, y podrás hacer algo al respecto.
Sepan Cuando Establecer Límites
Las parejas deben darse el debido lugar que merecen como esposos. Así que también es prudente que sepan cuando establecer límites; por ejemplo, pueden decidir el tiempo que compartirán con ambas familias, si desean vivir cerca o si permitirán que los suegros siempre vengan a la casa, etc.
Aún pueden compartir con sus suegros y ayudarlos cuando los necesiten; pero también deben comprender que tienen una nueva familia que atender, respetar y darles el debido lugar. No es necesario que sean duros con los suegros o les digan abiertamente que no quieren que hagan alguna cosa o que dejen de hacerla; más bien, demuéstrenles con tacto y respeto como manejarán las cosas de ahora en adelante, así lograrán realmente llevarse bien con la suegra.