¿Sabes que el final del verano y el inicio del otoño es un período propicio para cuidar el jardín? Las temperaturas comienzan a descender, al igual que lo hace la intensidad de la radiación solar. Es el momento de airear el suelo para oxigenar las raíces de tus plantas.
Si deseas conocer otros tips sobre cómo mantener un jardín cuidado, sigue leyendo.
Consejos infalibles para presumir de jardín todo el año
Seguro que este verano has celebrado más de una comida o cena con amigos y familiares en tu jardín. El tránsito de gente y las altas temperaturas exponen el césped a un estrés que conviene abordar para seguir disfrutándolo por mucho tiempo.
Vigila el estado del sustrato
Cuidar la calidad del suelo es esencial para mantener el jardín sano y con buen aspecto. El sustrato de tus plantas y flores debe estar nutrido y libre de químicos. Te desaconsejamos el uso de fertilizantes y fitosanitarios. Además de inhibir la proliferación de microorganismos beneficiosos, dificultan el drenado del agua y contaminan.
Optar por abonos naturales, materia orgánica y compost de lombrices favorece que los insectos polinizadores y los depredadores de plagas te echen una mano en la contención de, por ejemplo, los hongos.
La fertilización debe ser acorde al tipo suelo del que se trate. Así, los ligeramente ácidos, con un pH que ronda el 6,2-7, son los idóneos para que la concentración de nitrógeno sea la adecuada. De este modo, estarás previniendo la aparición de malas hierbas y de plagas.
Atiende a la calidad del agua
Si el agua de riego contiene cal, alterará el pH del suelo. Si la tomas del grifo, excederá del cloro aconsejable. El resultado en ambos casos será el mismo, el sustrato será de baja calidad. El agua de lluvia, recogida de los canalones del tejado, es la de mejor calidad para hidratar tu césped y el resto de vegetación.
Conviene realizarlo a primera o a última hora del día para evitar los golpes de calor. Estos favorecen la evaporación y pueden quemar tus platas por un efecto lupa.
Poda y elimina las hojas secas
Deshazte de las hojas secas, del suelo y de las plantas, y poda las zonas en mal estado. Crecerán más fuertes al aprovechar al máximo los nutrientes.
Corta el césped
Junto al abonado, mantener el césped a una altura de entre 5 y 10 cm le facilita asimilar los nutrientes y la radiación solar para lucir el verdor que deseas. Te recomendamos que lo hagas al atardecer y con la hierba seca para conseguir un corte uniforme.
En verano, deberás repetirlo, como mínimo, una vez por semana. En primavera y otoño, será suficiente con que lo hagas 2 veces al mes, y en invierno, 1 o 2 veces a lo largo de la estación.
¿Qué hay de la decoración?
Ahora que conoces los cuidados imprescindibles para mantener un jardín en óptimas condiciones, llega el momento de embellecerlo aún más:
- El colorido de las flores siempre alegra la vista y te permite captar la atención hacia un punto en particular. Deberás tener en cuenta de cuánto tiempo dispones para su cuidado y cuál es el clima de tu zona.
- Crear caminos con piedras o cortezas aporta personalidad al jardín. Sin perder de vista el equilibrio, puedes valerte de mobiliario para exterior como un banco de jardín o una tumbona plegable para crear distintos ambientes.
Como ves, mantener un jardín bonito y cuidado no tiene misterios. Basta con que sigas estas recomendaciones y le pongas mucho cariño.