Tiene unos elementos que son básicos y prácticamente obligatorios, como los datos personales, los estudios realizados y el historial laboral, sin embargo, se puede incluir cualquier otro dato adicional que destaque.
Ahora bien, la manera como se presenta esa información es lo que va a determinar si el currículum vitae está bien redactado o no. Es muy importante hacerlo de manera que todo se entienda, se destaque lo importante y no se omita lo esencial.
La apariencia
Para escribir un CurrÃculum Vitae que sea efectivo, es necesario cuidar todos los detalles. Aunque la información es lo más importante, también hay que cuidar la apariencia del documento. Hay que recordar que en cada selección de personal, las empresas reciben muchas solicitudes, entonces el primer objetivo de un Curriculum Vitae es destacarse del montón.
Para esto el diseño gráfico es muy importante. Se deben elegir los tonos a utilizar -lo máximo son dos-, y es preferible elegir tonos sobrios y elegantes como el azul, verde oscuro o el gris. De esa manera el aspecto será muy elegante.
Los elementos del Curriculum Vitae deben estar equilibrados, es decir, bien distribuidos en la página. Esto hace que el lector tenga una experiencia agradable al leerlo.
El tamaño de la letra no debe ser muy grande ni muy chica, una buena idea es el tamaño 12 o 14. Los diferentes tamaños se pueden usar para destacar los detalles que nos interesen. La fuente debe elegirse con cuidado, debe leerse bien y no tener demasiados adornos.
¿Qué información incluir?
Hay que incluir los datos personales completos, ya que pueden ser relevantes para algún detalle del cargo que no conocemos, por ejemplo, la empresa puede considerar importante que el prospecto viva cerca de la empresa, también puede ser vital para ellos que cuentes con una línea fija, además del móvil y muchos otros.
La información académica debe ir de lo más reciente a lo más antiguo y hay que separar todo por categorías, por ejemplo, los estudios formales primero, luego los cursos y después los talleres, seminarios y otros similares.
La experiencia laboral es determinante para que el futuro empleador se forme una idea de tu perfil laboral. Cada cargo debe llevar una descripción, muy corta y precisa, que indique exactamente de qué se trataba tu trabajo, destacando las habilidades que se requerían para ello.
Si no se tiene experiencia laboral, se puede incluir actividades que evidencien habilidades que pueden ser útiles. Por ejemplo, si organizaste una colecta en tu comunidad, significa que tienes destrezas de líder; si te ha tocado pertenecer al grupo organizador de un evento en tu escuela significa que sabes trabajar en equipo.
Si no tienes nada que mostrar a ese respecto, entonces puedes redactar una descripción del cargo que quisieras desempeñar y aprovechas para destacar que estás dispuesto a aprender y aportar una mirada fresca a la organización.
Además de eso, puede ser conveniente incluir los hobbies, actividades deportivas, intereses, etcétera. Hay que evaluar cada caso e incluirlo si aporta algo al perfil, si no es así, es mejor descartarlo.
Consejos finales
- Es aconsejable presentar el Currículum Vitae en una sola página. Salvo excepciones, es la mejor manera de que luzca profesional y atractivo.
- Siempre hay que incluir una fotografía, esta debe ser reciente, nítida y con buena resolución. En la foto, el aspirante debe lucir una imagen profesional, el arreglo personal debe ser impecable, salvo excepciones, los caballeros deben estar de traje y corbata.
- Se debe revisar muy bien la redacción y la ortografía, también se deben cuidar los errores de transcripción y de impresión. Un Currículum Vitae con esos errores puede hacer pensar que el aspirante es descuidado o que no tiene verdadero interés en el cargo que busca.
Buscar trabajo es un trabajo, hay que tomarlo muy en serio y dedicarse a tiempo completo. Todo esto hasta obtener la posición perfecta que contribuirá con el desarrollo profesional.