Todos alguna vez hemos sentido nuestra piel un poco tirante, apagada y sin brillo, cuando acaban los días de verano. Esto se debe, principalmente, a una mala rutina de cuidados para la piel.
Los dermatólogos afirman que tomar el sol no es malo, sin embargo, cuando se nos pasa por alto proteger la piel de los rayos UV, es absolutamente normal que la dermis comience a presentar síntomas que indican que algo no va bien.
¿Cómo cuidar la piel durante el verano?
La piel es el órgano más extenso del cuerpo, y entre sus principales funciones está proteger al organismo de la amenaza que suponen las bacterias, la temperatura y las diferentes sustancias químicas. Por esta razón, las cremas solares en Farmacia Cuadrado se han convertido en uno de los productos más recomendados por los especialistas de la salud para mantener una piel saludable.
A continuación, se presentan algunas de las medidas más importantes que todos debemos tomar para mantener una piel radiante y luminosa durante el verano.
Mantener una buena rutina de cuidado de la piel
Este consejo puede parecer muy obvio, pero cuando estamos de vacaciones, por lo general nos olvidamos de muchas de nuestras rutinas, incluidas las del cuidado de la piel. En este sentido, es necesario lavar la cara para eliminar la suciedad y el exceso de grasa sobre la piel.
Conviene subrayar que una rutina de cuidado también debe contar con productos de limpieza óptimos para cada tipo de piel. Por ejemplo, se deben elegir un limpiador de pH equilibrado y sin alcohol, así como cremas de gel o a base de agua, para las pieles secas o grasas, respectivamente.
Hidratar la piel
Independientemente de si se trata de una piel grasa o seca, todos debemos usar cremas hidratantes y humectantes diariamente. No obstante, la hidratación es un paso clave para conservar una piel con brillo en el verano.
Después de un largo día de playa o piscina, es recomendable aplicar una mascarilla hidratante para devolver a la piel su elasticidad y refrescar la misma de forma eficiente.
No olvidar el protector solar
Los rayos UV pueden llegar a ser muy dañinos para nuestra piel, en cuestión de minutos, podemos pasar de tener un bronceado envidiable a experimentar quemaduras por el sol.
El protector es necesario para evitar un envejecimiento prematuro de la piel, así como la aparición de arrugas o de melanomas cancerígenos. De acuerdo con los profesionales de la dermatología, no debemos salir de casa sin haber aplicado protector solar al menos 15 minutos antes. Asimismo, es importante elegir protectores de sol con SPF superior a 30.
Dejar que la piel respire
En ocasiones, nos podemos ver tentadas a usar maquillaje pesado para asistir a alguna reunión de verano, sin embargo, algunos productos de maquillaje pueden llegar a obstruir los poros y ser detonantes del acné. Lo mejor es dejar que la piel respire, pero si necesitamos un toque de color en el rostro, siempre podemos comprar algún bálsamo labial que resalte nuestras facciones.
Beber suficiente agua
Para combatir el calor del verano, es aconsejable beber abundante agua, al menos de 2 a 3 litros diariamente. Además, también se pueden aprovechar las frutas de temporada, como la sandía o el melón, para mantenernos frescos.
El agua es un líquido vital que debe convertirse en nuestro aliado durante el verano, ya que permite liberar toxinas del organismo y ayuda a mantener una piel saludable.
Las vacaciones de verano son un momento ideal para disfrutar del buen tiempo, relajarnos y olvidarnos de la rutina diaria, sin embargo, es necesario tomar ciertas medidas preventivas para poder lucir una piel saludable y radiante.