La figura del notario
Los notarios Madrid son las figuras más relevantes dentro de la ratificación y verificación de los hechos jurídicos. A su vez, el notario cumple una función clave como profesional del Derecho, pero también responde a las necesidades que siempre ofrecen los funcionarios públicos. Esta última cumple con la función de oficializar en el ámbito legal, dando fe; mientras que la primera aconseja a los particulares sobre las dudas de su servicio.
El motivo por el que esta figura es tan respetada por la población es por el nivel de conocimiento y profesionalidad que exige el cargo. Para ser notario no basta con querer, sino que supone un sacrificio y un compromiso muy grande, ya que exige de primeras la carrera de Derecho, pero sobre todo, necesita además superar una de las oposiciones más duras que existen en el país, y que por tanto, no todo el mundo suele superar.
Estos profesionales deben pasar 4 exámenes, 2 orales frente a tribunales exigentes que obligan a la memorización completa de las leyes, palabra por palabra para superar estos exámenes, para después poner en práctica todos esos conocimientos con otros 2 exámenes escritos. Deben conocer por tanto el Derecho Civil y la Legislación Fiscal, además de los Derechos Procesales, Mercantiles y Administrativos.
Pero la figura del notario no es la de un experto que estudia una gran cantidad de información, aprueba y se queda ahí. Las leyes cambian y se modifican, y por lo tanto, los notarios están en constante estudio y aprendizaje durante toda la vida.
¿Qué funciones prácticas ejercen los notarios?
Aunque ya se han mencionado las dos labores principales que practican los notarios, para entenderlas mejor, hay que ejemplificarlas y mencionar su significado y función:
- Escrituras: se utilizan para la documentación de un contrato o negocio jurídico al crearse ese propio documento, de manera que no deje ni arroje ninguna duda sobre el acuerdo. Además de esa condición indubitable, este acuerdo debe mostrarse con el mayor nivel demostrable y probatorio, acorde al sistema jurídico del país.
- Las actas: es un ejercicio de verificación de datos y hechos, en el que mediante un documento notarial, el notario da fe y registra esos hechos concretos para que el propio cliente pueda presentarlos, acreditando los mismos donde le interese.
- Testimonio: el notario acredita los documentos que especifican ciertas circunstancias importantes y que también dan fe sobre la autenticidad de las firmas y la identidad de las personas presentes en el documento.
- La póliza intervenida: en estos casos, el notario da fe, tanto sobre la identidad como sobre la capacidad y legitimación de las personas que firman una operación bancaria, normalmente la de una operación de crédito en la que se comprueba la legalidad y se explica el contenido al cliente, dejando que no exista ninguna duda ni indicio de sospecha sobre la acción.
Aunque éstos sean los principales cometidos prácticos, existen además situaciones en las que un notario cumple funciones fundamentales, como es el caso del área de las herencias y testamentos que tantos conflictos familiares pueden generar. Los notarios permiten asegurar que todo esté en orden, al igual que en los acuerdos privados o en la creación de sociedades.