Algunos síntomas que empiezan a aparecer nos indican que ya es hora de visitar una óptica, así que veamos cuáles son esas señales y necesidades, de acuerdo al tipo de cristales.
Las dificultades y síntomas empiezan a surgir
Un signo común que hace que te plantees cambiar tus gafas es la aparición de síntomas secundarios. Con esto no queremos decir que sea exactamente la disminución de la agudeza visual, sino problemas como dolores de cabeza que surgen en función de la mala visión, siendo consecuencia directa del esfuerzo que hacen tus ojos para enfocar mejor.
Otros síntomas son las molestias visuales e inclusive estirar el brazo para mejorar el enfoque y facilitar la lectura, algo que recibe el nombre de presbicia. La distancia correcta para una buena lectura es de 40 cm.
¿Cómo están tus gafas?
La condición de las gafas es otro factor a considerar. El tiempo de vida útil de las gafas es aproximadamente de dos a tres años, después de ese período los materiales comienzan a perder su resistencia y tienden a romperse fácilmente o perder sus ajustes originales.
En muchos de los casos la montura permanece intacta y en lugar de comprar unas gafas nuevas, puedes reemplazar los cristales y aprovechar la montura si te gusta y quieres conservarla.
Si tienes unas gafas de sol nuevas y quieres graduarlas, o los cristales de éstas se encuentran ralladas y no deseas gastarte mucho dinero en reemplazar todo, en Cristales Gafas podrás encontrar todos los tipos de cristales graduados que hay en el mercado. Y es que no hay mejor sitio para reemplazar tus gafas que en cristalesgafas.com, además que cuentan con la profesionalidad y experiencia necesaria.
Las gafas oscuras son la mejor arma contra la luz solar y las radiaciones dañinas y ultravioletas, es por eso que el uso de un buen par de lentes graduadas puede realmente ser la salvación para prevenir diversos efectos secundarios provocados por los rayos UV, como la disminución de la sensibilidad a la percepción del color y la aparición de cataratas.
¿Lentes monofocales, progresivos u ocupacionales?
Las lentes monofocales ofrecen una corrección igual en todo el cristal, ya sea para visión de lejos como visión de cerca y corrigen la miopía, hipermetropía y el astigmatismo. Éstas son el tipo de lentes que casi todas las personas utilizan desde la infancia hasta la aparición de la presbicia.
La presbicia es el defecto visual que aparece aproximadamente alrededor de los 40 años. Pero no hay porque preocuparse, ya que a través de internet puedes encontrar el precio lentes progresivas varilux y comparar con otras lentes, aunque son precios sin competencia.
Una persona con presbicia ve borroso de cerca pero de lejos no. La tecnología de las lentes progresivas permite que veas claramente en todas las distancias con las mismas gafas; en el caso de la presbicia, miras por la parte superior de la lente progresiva para poder ver de lejos, y por la parte inferior para ver de cerca. En este sentido, la transición entre las dos distancias de visión se realiza de forma natural, sin tener que quitarte las gafas.
Luego están las lentes ocupacionales, que están destinadas para todas aquellas personas que se pasan horas frente al ordenador, ya que estas facilitan el descanso de tus ojos.
Otras que complementan las lentes de visión simple y lentes progresivas son las multifocales. Se pueden clasificar en lentes bifocales, que incluyen visión de lejos y visión de cerca o lentes de enfoque triple, con visión de lejos, visión intermedia y visión de lejos; su desventaja es hacer imperfecta la visión intermedia, lo que provoca saltos de imágenes.
Finalmente siempre debes consultar a un óptico y realizarte una revisión de la vista una vez al año. Para aquellos que usan gafas a diario es una rutina obligada, ya que en algunos casos el grado tiende a progresar con el tiempo, y por lo tanto habrá que reemplazar los cristales de las gafas por unos acordes con la nueva graduación.