El bordado es la forma más tradicional, elegante y práctica para personalizar las prendas de vestir y los objetos de uso personal que existen. El uso de la aguja y el hilo para decorar telas es un arte milenario que ha formado parte de la historia de diversas culturas, especialmente para engalanar las prendas de vestir, dándoles un carácter particular o para mostrar cierto estatus.
La tecnología ha permitido que ese trabajo delicado, dominado principalmente por las damas y que llevaba su tiempo, hoy en día se pueda realizar de manera rápida y económica, permitiendo estampar diseños de gran variedad en objetos elaborados principalmente en tela o cuero, destinados a todas las edades. Desde la ropa y el ajuar del bebé, a chaquetas de cuero o cobertura para asientos de automóviles, los bordados hoy en día se pueden personalizar.
Desde el proyecto más pequeño al más grande
Los equipos de bordado actuales permiten hacer desde los diseños más sencillos a las imágenes más complejas mediante un bordado. En un buen taller de bordados de Madrid es posible concretar proyectos para personalizar los uniformes de una empresa o tienda, así como para eventos familiares o festivos. Todo esto es posible gracias a la digitalización, que permite tomar una imagen y convertirla en bordado.
Los talleres especializados reciben gran variedad de pedidos, desde una pieza hasta miles de unidades, según el proyecto que se requiera, debido a que en los talleres cuentan con máquinas de bordar informatizadas que pueden plasmar la imagen digital de forma fidedigna. Al tener el logo o diseño digitalizado, el proceso de bordado se simplifica.
Es recomendable acudir a empresas líderes en el sector del bordado que ofrezcan un trabajo de calidad y una atención esmerada, tanto con pedidos pequeños como en cantidades industriales, y que sean económicos y de calidad en cualquiera de las opciones.
Tipos de bordado
La gran demanda de este tipo de trabajos ha permitido ofrecer trabajos de bordados Madrid muy baratos. Uno de los pedidos más recibidos es el bordado personalizado, perfecto para toallas, bolsos, camisetas, sudaderas, gorras, albornoces, cazadoras, albornoces, prendas de trabajo o deportivas, mantillas de bebé, pañuelos, para recuerdos de eventos, entre otras alternativas.
El bordado personalizado de imágenes se efectúa mediante un proceso conocido como vectorización o descomposición de una imagen que codifica las diferentes puntadas, según el color de cada parte de la imagen o texto que entrega el cliente. Una segunda fase, que se denomina picaje, determina el tipo y la cantidad de puntadas que se requieren para hacer el bordado.
Existe el picaje automático que ofrece el ordenador, y el manual, que se hace para obtener un acabado más profesional. Las bordadoras industriales pueden realizar trabajos que combinan desde 6, hasta 12 y 18 colores.
Es esencial tener claros los conceptos de los aspectos que intervienen en el bordado si se quiere conseguir un trabajo de calidad por el mejor precio. El tipo de hilo, la cantidad de colores, el tipo de picaje y la tela de la prenda, son partes de esos factores.
En Madrid, las empresas especializadas reciben pedidos al momento para colocar el nombre o las iniciales en algunas prendas, además del servicio de bordados express para eventos que se entregan en unas 48 horas, dependiendo de la cantidad de prendas a bordar.
No hay límites
El bordado tiene una alta demanda para el marketing de un negocio, debido a que un logo con buen acabado en un uniforme, mantelería, gorras, prendas para obsequiar o vender con una marca, habla del cuidado de los detalles, una forma de proyectar seriedad y estabilidad.
Bordar garantiza que los nombres no perderán color o se caerán con el proceso de lavado, si se realiza con material de alta calidad.
Una alternativa muy práctica es ordenar la elaboración de parches bordados para personalizar o decorar la ropa, estos se pueden coser o, si se eligen los termosellados, se pueden pegar a la ropa al aplicarlos con una plancha. Otra opción es el bordado directo, que se puede hacer en camisetas, polos, gorras, calzados, pantalones.
Si la idea es tener prendas únicas, el bordado personalizado es la alternativa perfecta. Una tendencia muy de moda es el bordado de faldas de mezclilla o de cualquier tela, a la que se le pueden bordar imágenes de diferentes formas o colores. El cliente puede elegir hilo de poliéster o de bambú; el segundo es de más alta calidad, por consiguiente más costoso, y el primero es barato y también de calidad.
También se pueden personalizar las cazadoras de diferentes materiales con logos, dibujos de animales, mensajes o imágenes que le den una personalidad particular, ya sea rockera, romántica o deportiva.
Por otro lado, se han puesto muy de moda las mascarillas con bordados personalizados, tanto para empresas como para uso particular. También hay una tendencia con los llaveros de diversos materiales, también con bordados.
Los amantes de los caballos pueden personalizar las mantas, sudaderas, toldos, barreras, mantas, lonas, etc. El bordado para los centros ecuestres requiere una puntada especial, que no deje ver la textura de la tela y que no genere roce con el animal.
Para regalos más íntimos, hay una alta demanda de ropa interior con bordados especiales, lo que da espacio a mensajes muy especiales e íntimos, que llaman a la complicidad entre la pareja.
Bordados de alta calidad
En cuanto al acabado, hay bordados simples, unicolores, imágenes multicolores y en degradados. Entre los proyectos más delicados está el bordado litúrgico, que es el que se hace para las indumentarias eclesiásticas elaboradas en hilo metálico con detalles religiosos. Se trata de una labor que se debe dejar en manos de expertos.
Los proyectos de alta exigencia, como estandartes, bandas para concursos de belleza y otros trabajos de alta calidad, necesitan ser confiados en especialistas en el sector con años de experiencia. Una forma efectiva de encontrar a la mejor empresa, es verificar los trabajos previos y la opinión de los clientes.