BERLÍN (La tarde) – Un grupo liderado por el activista de privacidad Max Schrems presentó el lunes (16 de noviembre) quejas ante las autoridades de protección de datos alemanas y españolas sobre la herramienta de seguimiento en línea de Apple, alegando que permite a los iPhones almacenar datos usuarios sin su consentimiento, en violación de la legislación europea.
Es la primera demanda importante contra el grupo tecnológico estadounidense en relación con las normas de privacidad de la Unión Europea.
Apple no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
El gigante de la tecnología californiana dice que ofrece a los usuarios un mayor nivel de protección de la privacidad. La compañía anunció que endurecería aún más sus reglas con el lanzamiento de su sistema operativo iOS 14 este otoño, pero en septiembre dijo que retrasaría el plan hasta principios del próximo año.
Las quejas del grupo de derechos digitales Noyb se realizaron contra el uso por parte de Apple de un código de seguimiento que se genera automáticamente en cada iPhone cuando se configura, el denominado Identificador de anunciantes (IDFA).
El código, almacenado en el dispositivo, permite a Apple y a terceros rastrear el comportamiento en línea y las preferencias de consumo de un usuario, algo vital para que empresas como Facebook puedan enviar anuncios dirigidos que le interesen al usuario.
“Apple coloca códigos que son comparables a una cookie en sus teléfonos sin el consentimiento del usuario. Esta es una clara violación de las leyes de privacidad de la Unión Europea”, dijo el abogado de Noyb, Stefano Rossetti.
El Sr. Rosetti se refirió a la Directiva de privacidad electrónica de la UE, que requiere el consentimiento previo del usuario para la instalación y el uso de dicha información.
Las nuevas reglas planeadas por Apple no cambiarían eso, ya que restringirían el acceso de terceros, pero no las de Apple.
Apple es responsable de uno de cada cuatro teléfonos inteligentes vendidos en Europa, según Counterpoint Research.
Los reclamos se hicieron en nombre de consumidores individuales alemanes y españoles y se entregaron a la autoridad española de protección de datos y su contraparte de Berlín, dijo Noyb, un grupo de privacidad dirigido por el austriaco Schrems que luchó con éxito dos juicios históricos contra el Facebook.
En Alemania, a diferencia de España, cada estado federal tiene su propia autoridad de protección de datos.
Ambas autoridades no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Rossetti dijo que la acción no se trata de multas elevadas, sino de establecer un principio claro de que “el rastreo debe ser la excepción, no la regla”.
“IDFA no sólo debe restringirse, sino excluirse permanentemente”, dijo.
Las autoridades nacionales de protección de datos tienen el poder de multar directamente a las empresas por violar la legislación europea en virtud de la Directiva de privacidad electrónica.