Aunque el tema de las adicciones es muy amplio, todas ellas tienen como base que el comportamiento compulsivo de quien lo sufre, perturba todos los aspectos de su vida; tanto a nivel individual como familiar. Y es que, cualquiera que piense que su adicción no afecta su vida, su desempeño laboral y social y que no perjudica a otros o su relación con ellos, simplemente está en fase de negación. O tiene la memoria selectiva enfocada solo en satisfacer su necesidad compulsiva.
¿Cuál es el peligro de las adicciones?
El peligro de las adicciones es que día a día y de forma gradual van ocupando todo el tiempo y las energías de una persona; para ella no hay otra prioridad que no sea satisfacer su dependencia. Y es que, con el tiempo, los distintos tipos de adicciones ocasionan cambios cerebrales que para algunos pueden ser irreversibles. Sin embargo, debemos tener bien claro que los efectos de las adicciones varían de una persona a otra, según el contexto donde se den y de sus circunstancias de vida.
También, existen ciertos hábitos que socialmente son aceptados y que en determinadas personas crean adicciones. Como ejemplo, la ingesta de alcohol, cafeína, nicotina o el juego, pueden dar pie a que una persona se haga adicta y que su vida gire casi exclusivamente en torno al deseo de satisfacer esa adicción. Ahora bien, debido al aislamiento social por el covid19, otros tipos de adicciones han surgido o aumentado drásticamente; son las llamadas adicciones conductuales.
¿Cuáles son las principales adicciones químicas?
Son muchas, y detallaremos brevemente algunas de las más frecuentes.
Cannabis o marihuana
Como generalmente se consume en su estado natural, muchos jóvenes e incluso adultos creen que la marihuana no es dañina. Sin embargo, estudios científicos demostraron que consumir esta hierba causa problemas para mantener la atención y recordar información nueva; entorpece los reflejos dificultando las actividades físicas, deportivas y aumentando el riesgo de accidentes. El adicto puede sentir depresión, nerviosismo y tener firmes pensamientos o sentimientos de que algo malo pasará.
Estimulantes tipo ETA
Anfetamina, dexanfetamina, metanfetamina y éxtasis ocasionan riesgos de sufrir arritmias, daño hepático, afectar al corazón hasta causar la muerte, hemorragia cerebral, deshidratación y disnea. A largo plazo se corre riesgo de padecer desnutrición y existen datos alarmantes que prueban que el éxtasis es una neurotoxina capaz de generar daño neurológico al cerebro.
Sedantes y pastillas para dormir
Son depresores que ayudan a dormir, bajar la ansiedad, estabilizar el ánimo, aliviar dolores musculares, convulsiones o traumatismos. Sin embargo, su uso frecuente, sobrepasar las dosis indicadas y combinar su ingesta con alcohol u opioides aumenta el riesgo de sobredosis y muerte. Es una de las adicciones quÃmicas más comunes.
¿Qué son las adicciones conductuales?
En estos casos la adicción se enfoca en cualquier objeto, actividad o conducta que se convierte exclusivamente en lo primordial para una persona; que la daña física, mental o socialmente y afecta a otros. En este sentido, pudiera darse el caso de que conductas normales e incluso sanas pasen a ser anormales según la frecuencia, la intensidad, el tiempo o el dinero invertido en ellas. Cuando se pierde el control sobre algo y esto resalta en exceso en la vida diaria, se da una adicción conductual.
La adicción conductual es una acción repetitiva que genera alivio tensional y placer, que se escapa al control de la persona; entonces afecta cada vez más en el tiempo su vida cotidiana, familiar, laboral y social. En un estado avanzado la adicción conductual causa comportamientos automáticos, activados por emociones e impulsos; donde el adicto no mide las consecuencias negativas de su adicción.
Cuáles son las adicciones conductuales más conocidas
Entre las más comunes están el juego patológico, que es promovido socialmente y donde el afectado acaba endeudado; con problemas muy difíciles de resolver. La adicción al internet y las nuevas tecnologías de realidad virtual, que tienen enganchados a los jóvenes y muchos adultos. También, las compras compulsivas de productos, cosas y objetos que jamás se usarán y terminan simplemente acumuladas.
Son frecuentes las adicciones al sexo que irónicamente resultan en que el adicto termine solo y auto aislado socialmente. La adicción al trabajo que es promovida socialmente, afectando la salud del adepto y destrozando su familia. Están los trastornos alimenticios como la anorexia o bulimia; la ortorexia, que es un trastorno conductual por la comida sana. Y la vigorexia que propicia la adicción al ejercicio, el consumo excesivo de proteínas, carbohidratos y esteroides para ganar masa muscular
Algo muy común actualmente son los trastornos obsesivos por la estética, que llevan a muchos adictos a exponer su salud a graves peligros. Y las dependencias afectivas que incapacitan a la persona a experimentar nuevas experiencias sociales y la mantienen adicta a una sola persona. Afortunadamente, si estás en Madrid cuentas con la ayuda del Centro de Desintoxicación Momento donde encontrarás el alivio que necesitas.