Esto está destinado a acabar en varios problemas de salud, empezando por un malestar físico continuo que representará la incapacidad de nuestro cuerpo para digerir y distribuir correctamente los distintos nutrientes que le estamos mandando.
En la dieta occidental actual priman alimentos endulzados hasta la saciedad. También encontramos alimentos con grasas saturadas, con grasas naturales, con sal, un combinado de nutrientes que provocará problemas cardiovasculares y de peso.
Situados en este contexto, es normal que la salud de nuestra población se vea cada vez más mermada por el colesterol y la obesidad. Sin embargo, existen soluciones claras para esto, siendo lo más valioso, la formación que nos pueden ofrecer los nutricionistas profesionales.
A continuación tocaremos los distintos campos de nuestra vida cotidiana en los que nos puede ayudar visitar la clínica de un nutricionista en Málaga. Hablaremos de cómo perder peso y de cómo evitar un exceso de fatiga tras la actividad deportiva mediante la alimentación.
Dieta para perder peso
Lo primero es sentar las bases de lo que conformará una nutrición sana y estable. Una correcta dieta requiere de horarios bien marcados y constantes.
También requiere un cierto grado de personalización, basado en nuestro peso y nuestro metabolismo.
Comer bien no tiene por que ser caro, ya que los alimentos que buscamos son de uso común y extenso. El arroz y las legumbres, por ejemplo, serán la clase de alimentos que un dietista en Málaga nos aconsejará, sobre todo en el caso de que suframos una deficiencia de hierro o problemas relacionados con la digestión.
Si buscamos perder peso, la mayoría de dietas de este tipo que encontraremos suponen un peligro para nuestra salud, debido al tremendo desequilibrio nutricional que conllevan. En su lugar, si buscamos realizar una dieta apropiada tenemos que empezar por planear cada comida de la semana.
Para evitar embrollos, las recetas han de ser simples pero completas, con medidas caseras pero también en gramos. Como es normal, esto también implica apuntar la lista de la compra que necesitaremos hacer cada semana.
Una vez hecho esto, el último paso es seguir semanalmente nuestros avances, dado que tenemos que asegurarnos de que la dieta está funcionando y cambiarla en los apartados en los que esté fallando.
Dieta deportiva
La realidad de nuestros cuerpos es que son sistemas complejos, en los cuales, todas sus partes están sumamente relacionadas. Si buscamos cuidar más de nuestro cuerpo a la hora de hacer ejercicio, es esencial conocer los consejos de un nutricionista deportivo.
Una estrategia nutricional adecuada puede llegar a retrasar la fatiga o el riesgo de lesiones a la hora de llevar a cabo una actividad deportiva. Esto es debido a que si nuestro cuerpo tiene los materiales necesarios puede llevar a cabo las labores de recuperación y reparación de nuestros tejidos con una velocidad mucho mayor. La inflamación de las articulaciones y los músculos dura menos, al igual que las lesiones.
La exclusividad de la dieta es un factor particularmente importante en el caso de la actividad deportiva, pues ya sea el deporte o la persona que lo realiza, las diferencias entre distintas personas hace que ninguna dieta se pueda estandarizar.
Aquellas personas que estén intentando aumentar su volumen muscular, por poner un ejemplo, necesitarán un consumo de calorías mayor que el número de calorías quemadas, pero además, se buscará una entrada constante de proteínas, para que su cuerpo sea capaz de reponer con más facilidad las fibras musculares que se rompen e inflaman durante el esfuerzo físico.
Esta dieta, si la llevamos a cabo apropiadamente, nos permitirá alcanzar el estado físico perfecto, equilibrando nuestra grasa corporal y nuestra masa muscular.
Nuestra salud se verá mejorada y no nos tendremos que preocupar por los muchos problemas de salud relacionados con una mala dieta.