Muchas veces, se requieren soluciones para pérgolas, techos o cerramientos de vidrio. Son estructuras que se usan en ambientes externos, por lo que deben tolerar la intemperie. Se trata de piezas estéticas, que suelen conformar la fachada de inmuebles. Requieren una excelente apariencia, con acabados y materiales de primera calidad. Muchas veces, son el complemento perfecto para trabajos de arquitectura o paisajismo.
Igualmente, se requiere una empresa que fabrique estas estructuras. Un buen ejemplo es el caso de CEPI. Una empresa con más de 40 años en el mercado, la cual ha logrado la satisfacción de una buena cantidad de clientes. Su especialidad son los cerramientos, cortinas de cristal, pérgolas y diversos cerramientos de vidrio. La excelente calidad de sus diseños, su durabilidad y mano de obra especializada le confiere mucha confianza en el mercado.
Los mejores cerramientos de cortinas de cristal
Cuando se habla de cerramientos de cortinas de cristal, se hace referencia a cerramientos móviles. Por eso, reciben la catalogación de “cortinas”. Implican un sistema que cumple una doble función: dar soporte al vidrio y permitir su movilidad. Los cerramientos de cristal son ideales para dar la sensación de amplitud, de vista abierta hacia el entorno. El detalle es que pueden ocasionar calor en ambientes internos.
Por lo antes dicho, se requiere que los cristales sean móviles. Hay varias alternativas de movilidad en los cerramientos de cristal. Algunas bastante útiles son las que mostramos en el siguiente listado:
- Hoja abatible
- Hoja corredera
- Panel deslizante sin guía inferior
- Corredera vertical.
Todas estas alternativas son de gran calidad. En dado caso, cada cliente escoge la alternativa de su preferencia. Además, se debe tener en cuenta el sitio de instalación. En ciertos espacios es preferible contar con determinados sistemas para la colocación de cortinas de cristal. No hay que olvidar que los cerramientos de cristal confieren gran elegancia. Por eso, son usados en gran cantidad de lugares.
La novedad de las pérgolas bioclimáticas
Las pérgolas bioclimáticas se usan desde hace algunos años. Están compuestas por una estructura de aluminio, diseñada a medida del sitio. Lo más interesante es que sus lamas se mueven, con un accionamiento motorizado o manual. La posibilidad de mover la orientación de las lamas ayuda a regular la temperatura, a la vez que mejora la protección contra rayos solares y lluvia.
- Son módulos de pérgolas que se ajustan a diversos ángulos.
- Con cero grados (0°), tenemos una pérgola cerrada y protegida.
- Con cinco grados (5°), es una pérgola que mantiene sombra y sigue protegiendo de la lluvia.
- Con cuarenta y cinco grados (45°), hay ventilación natural y se controla tanto la dirección como la intensidad del sol.
- Con noventa grados (90°), total aprovechamiento del sol y luminosidad natural.
- Con ciento cincuenta grados (150°), se permite la limpieza de la zona superior de las lamas.
Gracias a la ligereza del aluminio, las lamas se pueden movilizar sin necesidad de gran esfuerzo. Este movimiento se puede ejecutar manualmente (con ayuda de un mecanismo especial), o bien proveer al sistema de pérgolas de un motor. Incluso, este motor se ajusta para que coloque las lamas en determinada posición a ciertas horas del día.
Las ventajas de las pérgolas con techo retráctil
Una pérgola con techo retráctil es una versión de la pérgola bioclimática. La diferencia es que recoge por completo. Esto se combina con un movimiento de giro y recogida. Son pérgolas que siempre poseen un sistema motorizado para el movimiento de las lamas.
- Las lamas se pueden recoger en modo completo, logrando así una abertura completa.
- También, es posible hacer aperturas parciales de las lamas de la pérgola.
- El ángulo de recogida de las lamas, cuando realiza su plegado, oscila entre los 0° y hasta los 80°. De este modo, se logra optimizar la luz solar y ventilación por convección.
- Con la apertura completa, se tiene un techo completamente libre.
Estas pérgolas se pueden instalar: a) adosadas a muros, b) con estructura autoportante, c) sin portes y a manera de cantiléver, d) con estructura de múltiples nódulos. Por lo tanto, son versátiles en su colocación. Dependen de una fuente de energía cercana para el motor que desplaza las lamas. Se les puede dotar de varios accesorios, como por ejemplo, sensores para el movimiento de las lamas o iluminación.
Los sistemas de pérgolas, techos y pérgolas retráctiles, así como de cortinas de cristal, permiten gran cantidad de soluciones. Todas estas estructuras y cerramientos se deben confeccionar en materiales de calidad, ya que están a la intemperie y deben tener una buena estética.
