Comprar un coche de segunda mano puede ser una forma excelente de ahorrar dinero y encontrar un vehículo que se adapte a tus necesidades. Sin embargo, es fundamental tasar a fondo el coche antes de realizar la compra para asegurarte de que estás adquiriendo un vehículo fiable y con una buena relación calidad-precio.
Si te encuentras en búsqueda de la mejor empresa para la revisión coche segunda mano, tu mejor aliado en esto serán cautos, expertos en peritaje de vehículos usados, con muchos años de experiencia y profesionales de alta calidad. De igual modo, aquí te ofrecemos una guía completa sobre cómo tasar un coche de segunda mano, con los factores esenciales a tener en cuenta y los pasos a seguir.
Investigar y recopilar información
Antes de tasar un coche de segunda mano, es fundamental investigar a fondo. Lo mejor es comenzar por reunir información sobre la marca, el modelo y el año del coche que te interesa. También debes enfocarte en encontrar cualquier problema común o retiradas del mercado asociadas con el vehículo específico para tener una idea de los problemas potenciales y sus soluciones.
Además, investiga el valor de mercado del coche en función de su antigüedad, kilometraje, estado y características adicionales.
Inspección exterior
Inicia el proceso de tasación examinando el exterior del coche. Encuentra cualquier signo de óxido, abolladuras, arañazos o pintura desparejada. Asegúrate de que los paneles de la carrocería están correctamente alineados y de que las puertas, el maletero y el capó se abren y cierran con suavidad.
Además, comprueba el estado de los neumáticos, incluida la profundidad del dibujo y los signos de desgaste irregular. Inspecciona las luces, incluidos los faros delanteros, las luces traseras y los intermitentes, para asegurarte de que funcionan correctamente.
Inspección interior
Es momento de evaluar el interior del coche. Comprueba el estado de los asientos, la tapicería y las alfombrillas para ver si hay desgarros, manchas o signos de desgaste excesivo. Prueba todos los componentes y funciones, incluidos el aire acondicionado, la calefacción, el sistema de audio, los elevalunas eléctricos y los retrovisores.
Asimismo, debes inspeccionar el salpicadero en busca de luces de advertencia o cualquier signo de mal funcionamiento.
Inspección mecánica
Evaluar el estado mecánico de un coche de segunda mano es crucial. Si no estás familiarizado con la mecánica del automóvil, considera la posibilidad de buscar la ayuda de un mecánico profesional u organizar una inspección previa a la compra.
Sin embargo, hay algunas cosas que puedes inspeccionar tú mismo. Comprueba el nivel de aceite del motor y su color, asegurándote de que no esté excesivamente sucio o contaminado. Examina la batería en busca de signos de corrosión o fugas.
Aquí debes enfocarte en probar los frenos, la suspensión y la dirección para ver si hay ruidos o vibraciones inusuales. Haz una prueba de conducción para evaluar su rendimiento general, incluyendo la aceleración, el frenado y el manejo.
Historial del vehículo y documentación
Solicita el historial del vehículo, que puede proporcionar información valiosa sobre su pasado, incluidos accidentes, registros de mantenimiento e historial de propiedad. Asegúrate de que el VIN (número de identificación del vehículo) del coche coincide con el VIN de la documentación. No olvides evidenciar si el vehículo está en regla y si tiene embargos u obligaciones financieras pendientes.
Negociar el precio
Basándote en su tasación, puedes negociar el precio con el vendedor. Si has detectado algún problema o reparación durante la inspección, úsalo para negociar un precio justo. Considera la posibilidad de obtener presupuestos de las reparaciones necesarias para conocer mejor los posibles costes.
Tasar un coche de segunda mano antes de comprarlo es fundamental para tomar una decisión con conocimiento de causa y adquirir un vehículo fiable. Si sigues los pasos descritos en esta guía y realizas una inspección exhaustiva, podrás identificar posibles problemas y negociar un precio justo.