¿Qué es una cláusula abusiva?
Cuando se habla de préstamos hipotecarios, se hace evidente la figura del banco como entidad prestamista. Es un tipo de contrato donde se coloca el bien inmueble como garantía en caso de impago, pero a partir de allí los contratos hipotecarios suelen tener términos y cláusulas de todo tipo, entre los que se encuentran las que el Tribunal Supremo ha dictaminado que son abusivas.
Una cláusula abusiva no es más que una cláusula que ha sido colocada por el prestamista sin una negociación con la parte prestataria, sino que por el contrario han sido adheridas al contrato de manera unilateral, incluso sin que el consumidor supiera que están allí o comprendiera exactamente qué significaba esa cláusula.
Las cláusulas abusivas de la hipoteca se pueden reclamar
La importancia de contar con abogados especialistas en el tema de las reclamaciones y del derecho al consumidor, como el caso de Lidiare Abogados, es que las cláusulas abusivas se pueden reclamar, incluso de contratos hipotecarios que ya hayan finalizado.
Durante las etapas de la crisis financiera global y particularmente de la crisis del sector inmobiliario en España, se evidenció mucho la existencia de cláusulas abusivas, aunque en aquel momento no estaban tipificadas como tal y por eso muchas personas y familias no pudieron seguir afrontando los pagos de su préstamo, perdieron su garantía hipotecaria o pagaron intereses de más, encareciendo el precio a pagar de su hipoteca.
Actualmente, la ley es tajante al respecto y todas las cláusulas abusivas se pueden reclamar, siendo un proceso además sencillo, hasta cierto punto económico, y bastante confiable si se realiza de la mano de expertos en el ramo.
Principales cláusulas abusivas en préstamos hipotecarios
Sabiendo de antemano que es posible reclamar cláusulas abusivas en la hipoteca y así poder obtener todo ese dinero que se ha pagado de más a los bancos, es conveniente saber cuáles son las cláusulas abusivas principales que aparecen en los contratos con garantía hipotecaria en España:
Cláusula sobre gastos del contrato hipotecario
Es una cláusula incluida unilateralmente en los contratos de hipoteca donde el banco obliga a los consumidores a asumir todos los gastos relacionados con trámites y formalidades de la hipoteca.
Sin embargo, la ley establece que los gastos notariales y de gestión administrativa se deben pagar por mitad, los gastos por modificación de las condiciones del préstamo también; pero es importante destacar que todos los trámites registrales y de impuestos corren por cuenta y pago del banco, ya que es esta entidad la que funge como prestamista y a la que se inscribe a favor la propiedad objeto de la hipoteca.
Cláusula de vencimiento anticipado
Se trata de una de las cláusulas más polémicas que se han incluido en los contratos de hipoteca, donde el banco se tomaba el atributo unilateral de terminar el contrato y exigir la devolución total del préstamo o la propiedad hipotecada, en caso de que el prestatario no pudiera asumir al menos una cuota de su contrato.
Dicha cláusula fue señalada como abusiva precisamente porque muchos casos de familias que llevaban 5, 6 o hasta 10 años pagando puntualmente su hipoteca, no pudieron asumir a tiempo el pago de 1 o 2 cuotas, y el banco ejecutó esta cláusula para finalizar el contrato y quedarse con la propiedad.
Cláusula suelo
Presente en los contratos hipotecarios a tasa variable o tasa Euribor, establece que existe un mínimo de interés a ser cobrado en caso de que el Euribor cayera por debajo de ese índice propuesto unilateralmente por el banco.
Con la caída de Euribor hasta números negativos, las personas lógicamente deberían pagar mucho menos dinero por concepto de intereses hipotecarios, pero en la práctica no fue así, gracias a que los bancos establecían un “suelo” de interés, motivo de que también sea considerada una cláusula abusiva.
