En momentos tan difíciles como los de la muerte de un familiar o ser querido, pocas son las personas que le dedican atención a la elaboración de una esquela mortuoria, y normalmente, suelen ser meras notas informativas para dar a conocer la muerte de la persona. Una vez que las hemos publicado, como por ejemplo en la sección de esquelas ABC, y han cumplido su función, tendemos a olvidarnos de ellas y a no recordarlas más. Pero hay quienes deciden salirse de la norma y deciden darle a esta publicación su propio toque, para dejar constancia de algunas bromas y sarcasmos que pueden arrancar la sonrisa a más de uno.
Hay esquelas de todos los tipos, desde aquellas personas que antes de morir han hablado con su familia acerca de lo que le gustaría que apareciera escrito, hasta allegados que deciden confeccionar una esquela a la medida de la personalidad de la persona que acaba de fallecer a modo de homenaje. Es por eso que vamos a ver algunos ejemplos realmente curiosos de algunas esquelas mortuorias publicadas y que no dejarán indiferente a nadie.
Un buena despedida
Una buena forma de despedir a una persona querida es añadiendo un pequeño toque de humor, como forma de poder sobrellevar mejor una situación tan complicada como ésta y arrancar a la gente una sonrisa. Es por eso que muchas esquelas optan por publicar mensajes de este tipo, con los que los familiares y amigos pueden recordar el buen humor que siempre ha caracterizado a la persona fallecida. Uno de los ejemplos más conocidos es el de Manuel Muñoz, esquela publicada en el ABC, y al que sus amigos del Club Chumbalaka le dicen, literalmente: «Manolo, no nos esperes levantado, ya iremos llegando… Tú a tu aire».
Otro ejemplo realmente curioso podría ser el de la esquela de E. Zarauz, en la que además de añadir un gesto altruista como el “se ruega no enviar flores ni coronas y sí en cambio un donativo para Médicos sin Fronteras»; también encontramos una de las mejores despedidas en una esquela con un «Gracias a todos, lo he pasado muy bien». Pero si hablamos de esquelas que reflejan el buen humor y la alegría de las personas queridas que han fallecido, una muy bonita es la del futbolista vasco Mikel Marroquín en la que se añadía a la fecha y hora de celebración de la misa, un “abstenerse gente triste”.
Reproches de todo tipo
La elaboración de una esquela también puede ser la ocasión propia para dejar constancia de algunas rencillas del pasado y que suelen tener un sentido humorístico y sarcástico. Por ejemplo, en la esquela de Miguel Ángel Morata Galarza publicada en ABC, sus familiares le reprochaban así el haberles dejado tan pronto: “¡¡Te vas sin dejarnos la receta de la paella de escabeche!!”. Un toque de humor realmente bueno para pasar estos momentos tan duros. Pero aunque la mayoría de reproches publicados en esquelas son más bien sarcásticos y humorísticos, también los hay que de broma parecen no tener nada. Es el caso de la esquela publicada en el aniversario de la muerte de Don Francisco Sánchez Pérez en Diario Hoy, y en la que una de sus hijas, aprovechaba la ocasión para soltar algunas pullas familiares como éstas: «Te pido que sigas intercediendo por mí para que Dios haga que tus sobrinas, Sánchez Fernández Gallardo, junto con tus dos sobrinos-nietos, Sánchez Palacios, cesen en el expolio de tus bienes que comenzaron sus antecesores».