LOS ÁNGELES – El actor y presentador James Corden tiene una resolución de Año Nuevo que no es diferente a la de la mayoría de las personas: perder peso.
El presentador de Late Late Show dijo: “Estoy harto de mi apariencia, estoy harto de no estar sano”.
El británico de 42 años reveló que probó varias dietas y falló repetidamente durante años: “Me di cuenta de que todos los años durante la última década, probablemente hasta 15 años, el 1 de enero me dije a mí mismo y a todos los que escuché que esto es todo, este es el año, me pondré a dieta, perderé mucho peso ”.
Se acercó a WW (anteriormente conocido como Weight Watchers), un programa de pérdida de peso y acondicionamiento físico, en busca de ayuda.
En un clip que anuncia su asociación con WW el viernes (1 de enero), dijo: “En Navidad, comí de todo en el refrigerador porque en mi cabeza en enero estoy comenzando esta dieta y será un éxito. Y como puede ver, no ha cambiado. “
Compartió en un comunicado de prensa: “Quiero cambiar la forma en que vivo. Quiero ser mejor para mis hijos y mi familia. No quiero despertarme cansado o avergonzado cuando estoy detrás de mi hijo en el campo de fútbol y sin aliento después tres minutos. “
La estrella británica tiene tres hijos menores de 10 años con su esposa Julia Carey, productora de televisión.
Había hablado antes sobre su peso y su lucha por conseguir papeles debido a su tamaño. También admitió que su mayor debilidad es el pan.
En una entrevista con The New Yorker en enero pasado (2020), reveló: “Era bueno interpretando a un juez emocionado en un tribunal, o sería el tipo que deja a Hugh Grant un televisor en una película”.
“Si alguien viniera de otro planeta y lo pusiera en televisión, pensarías que las personas grandes o con sobrepeso no tienen relaciones sexuales”, dijo en la entrevista.
“No se enamoran. Son amigos de personas que se enamoran. Probablemente no son tan brillantes, pero se divierten y no son tan valiosos como las personas que son realmente guapas”.
Sin embargo, su resolución de Año Nuevo no proviene de un deseo de roles más carnales, sino de una preocupación por su salud.
Dijo: “El peso no es el problema, es el bienestar que estoy dispuesto a afrontar. Disfrutaré este año y trabajaré para mantenerme saludable”.