Los incendios no son nada para tomarse a la ligera, pueden provocar desde algo tan sencillo y reparable como la quema de un bien mueble, hasta heridas de gravedad e incluso muertes en una a o más personas. Siendo así, es indispensable contar, sobre todo en espacios grandes y concurridos, con puertas cortafuego.
El uso de puertas contra incendio puede marcar la diferencia entre salir ileso o sufrir con consecuencias extremadamente negativas, motivo de una circunstancia de tal gravedad, y no solo por el fuego, sino por diversos factores que te mostraremos a lo largo del texto.
¿Qué son las puertas cortafuego?
Aunque para su creación existen diversos materiales, todas tienen un objetivo en común bastante deducible debido a su nombre. Sí, son puertas postradas en cualquier tipo de construcción para “cortar” e impedir el paso del fuego.
¿Qué tan importantes son las puertas cortafuegos?
A lo largo del artículo hemos hablado de la importancia de este tipo de estructuras, por tal, volverla a mencionar podría ser innecesario. Sin embargo, no deja de ser indispensable hablar de lo sumamente relevante de cada una de las características que deben poseer las puertas contra incendios.
Aislamiento de la temperatura
Estas puertas no solamente deben procurar mantener el fuego de un lado de ellas, también deben evitar quemaduras a las personas o animales del otro lado debido a las altas temperaturas alcanzadas por el metal de la cara contraria de la puerta sin el aislamiento correcto.
Sello de humo
El humo puede ser tan letal como el fuego si se concentra en un espacio reducido y cerrado al causar intoxicación o asfixia, por tal, la puerta debe estar perfectamente sellada para evitar la colación del mismo en lo absoluto ninguna pequeña cantidad.
Lograr ese sello perfecto no es tarea fácil, al igual que con el resto de las cualidades imprescindibles, se deben realizar una serie de pruebas, única y exclusivamente por profesionales del área.
Las evaluaciones e instalación efectuadas por expertos como los de Mobelmol, definirán si las puertas cortafuegos son o no seguras. De hacer caso omiso a las pruebas o permitir el manejo por personas no profesionales, podría dar como resultado la propagación del fuego a través de la puerta, del humo o de gases, y, por ende, en la muerte de todas las personas del otro lado.
Material resistente al tiempo necesario
En su mayoría el revestimiento es de hierro, en una aleación u otra. Sin embargo, no para todas las puertas cortafuegos el tiempo de resistencia es el mismo. Unas podrán soportar desde 30 minutos y otras hasta 3 horas de fuego. Lo importante es asegurar la existencia de la puerta en el tiempo seleccionado.
De preferencia, se debe optar por la mayor resistencia posible, en caso de no poder, por lo menos asegurarse sobre el tiempo de respuesta de los controladores del incendio. Por ejemplo, si es para un lugar apartado donde la respuesta podría demorar 40 minutos, no optes por el material de 30 minutos bajo ninguna circunstancia.
Facilidad de apertura
Aunque las puertas solo deben ser instaladas por profesionales, su manejo diario debe ser extremadamente sencillo y práctico, con el propósito de que cualquier persona pueda hacer uso de la puerta durante un incendio.
Debido a eso, deben tener posa manos igualmente aislado a la temperatura, capaz de permitir cerrar y abrir la puerta con facilidad. Deben estar bien posicionadas para evitar cualquier desajuste de la distribución del peso.
Una mala distribución desembocaría en la pérdida de equilibrio de la puerta y dificultaría su manejo. En pocas palabras, se debe asegurar una capacidad de uso totalmente perfecta.