Aunque vapear tuviera un mayor auge como alternativa al tabaco y como ejercicio de transición para abandonar las prácticas de fumado tradicionales, este se ha convertido en una opción alternativa para el consumidor que busca una sensación de alivio o como una acción más de ocio mediante la absorción de un gas no nocivo, frente al humo del tabaco tradicional. Este detalle es el que convierte al vapeo en una actividad más sana, ya que se evita la ingesta de componentes nocivos mediante el humo y que atacan a nuestra salud.
Teniendo en cuenta la gran cantidad de productos y distintos vapers que existen en el mercado, vapear nunca ha sido tan sencillo. Además, influye en ofrecer una experiencia personal para cada usuario. Veamos a continuación algunos detalles que debes conocer sobre los vapers y los e-liquids.
Qué es el vaper y qué tipos existen
Los vapers son dispositivos electrónicos que a partir de una resistencia que funciona con energía térmica produce una sustancia inhalable a partir de sustancias líquidas. Concretamente, este componente del dispositivo es una resistencia denominada atomizador que se encarga de transformar la energía eléctrica almacenada en una batería del dispositivo en energía térmica.
Dentro de los vapers existen dos tipos: los vapers desechables, que son aquellos que solo sirven para un uso, ya que se componen de atomizador, resistencia y cartucho para la recarga del líquido, frente a los reutilizables, que se pueden utilizar una gran cantidad de veces siempre que su cuidado sea el adecuado, se limpien los conductos correctamente para que no se obstruyan y en el caso de que se gaste la resistencia, basta con comprar una nueva e instalarla. Es un procedimiento muy sencillo que puedes realizar tú mismo en casa o el especialista de la tienda donde adquieras este componente.
Dependiendo de su tamaño, los vapers se pueden dividir en otras categorías: cigalikes, similares a los cigarros tradicionales en forma, generalmente desechables; los pods, de tamaño medio y de ambas modalidades de duración de uso; y los vaper kits avanzados, pensados para una mayor durabilidad que cualquiera de las otras opciones.
E-liquids, composición y otros detalles importantes
Los e-liquids son unos compuestos en forma líquida que se componen principalmente de tres componentes: la glicerina vegetal, el propilenglicol y diversos aromas.
La glicerina vegetal es el componente más abundante en estas sustancias, de incluso un 80% del total. La glicerina de los e-liquids se procesa a partir de aceites, por lo que más bien es un alcohol y su consumo es más seguro. Debido a su espesor, debemos elegir un e-liquid cuya composición sea acorde a nuestro vaper, ya que, dependiendo del modelo, los atomizadores pueden no absorber correctamente estas sustancias.
El propilenglicol es un alcohol que tiene como función principal mantener la humedad del compuesto. Frente a la glicerina, produce una menor cantidad de vapor, por lo que es ideal para aquellos usuarios que prefieran un vapeo más discreto.
Los aromas son añadidos que forman los el-liquids con la intención de que su sabor sea agradable y dote de un componente satisfactorio instantáneo al consumidor. Sus sabores y olores son muy variados, desde los tradicionales sabores afrutados, los aromas mentolados similares a los de algunas marcas de cigarrillos u otros sabores dulces.
En el caso de utilizar el vaper como alternativa al tabaco, las personas que cuentan con una gran adicción pueden necesitar de e-liquids que contengan nicotina. Existen distintas graduaciones que van vinculadas al nivel de adicción del consumir y que se podrán ir reduciendo hasta que tan solo se consuman e-liquids sin nicotina y se haya abandonado totalmente la ingesta de componentes nocivos en el fumado.
Nuestro consejo es que te dejes orientar por un profesional que pueda resolver todas tus dudas y que a partir de tu caso y la información que dispongas, sabrá elegir qué tipo de vaper y qué e-liquids son los mejores para ti personalmente.