Se trata de un material muy frecuente que se suele utilizar principalmente como revestimiento para las piscinas. Aunque es habitual verlo y reconocerlo, lo cierto es que pocos son los que conocen las múltiples características y, sobre todo, ventajas, de este material de obra.
Desde que se es pequeño, se está acostumbrado a ver las piscinas con un tipo de revestimiento común y muy visual. A pesar de estar familiarizado con este material, son muchas las personas que no lo conocen al detalle, incluso que no saben ni su nombre. En este caso, se está hablando del gresite. El gresite piscinas es una especie de azulejo de pequeñas dimensiones que generalmente está cubierto con una capa vítrea, la cual se suele cocer a altas temperaturas. Esto permite que sea un material impermeable, de ahí que su uso sea frecuente no solo en piscinas, sino también en zonas y habitáculos más húmedos como pueden ser los baños o las cocinas.
En cuanto a su composición, el gresite es un material que está unido por mallas o teselas, con unas pequeñas dimensiones, generalmente sus medidas suelen ser 2×2 cm y, en el caso de que se necesiten más grandes, entonces se van uniendo las mallas para conseguir la pieza deseada.
Principales características
Dentro de las muchas características particulares que se pueden destacar del gresite para piscinas, hay que decir que se trata de un revestimiento que se forma a partir de baldosas pequeñas de gres, de ahí su nombre. Se funde a altas temperaturas, lo que hace que se produzca una parte vítrea que presenta gran dureza y, sobre todo, muy buenas propiedades aislantes.
También hay que destacar que este tipo de losetas tienen gran resistencia a las heladas, las variaciones de temperatura extremas y la humedad, a lo que se añade que se puede tratar sin problemas con productos químicos. Otra de sus características más significativas es que, aunque esté durante mucho tiempo expuesta a la luz, la loseta permanece con la misma tonalidad, no se desgasta.
De igual modo, es importante mencionar que este material cuenta con una gran flexibilidad y, además de utilizarlo para cubrir superficies curvas, también es muy bueno como elemento decorativo, teniendo en cuenta que se pueden encontrar en una gran variedad de colores y opciones creativas.
Tipos de gresite
Hoy en día en el mercado se pueden encontrar diferentes tipos de gresite que se diferencian en base a su color, forma y textura. En el primer caso, hay que decir que existe un amplio abanico de posibilidades de tonalidades de gresite, desde el blanco al negro y otras modalidades cromáticas.
Con respecto a su forma, también hay una gran variedad, pudiendo encontrar modelos redondos, triangulares, circulares, rectangulares o cuadrados, sabiendo que son todos ellos totalmente adaptables a prácticamente cualquier espacio y diseño.
Finalmente, con base en su textura, hay gresites lisos, que son los más recomendados para las piscinas y otros antideslizantes.
¿Cuáles son sus ventajas?
Teniendo en cuenta todas las características que presenta el gresite, no es de extrañar que cada vez sea un material más utilizado, a lo que se suma todas sus ventajas. Entre otras, hay que destacar su gran resistencia, tanto a las condiciones químicas como físicas externas, de ahí que sea 100% recomendable para instalar en las zonas húmedas. También hay que decir que se puede adaptar a cualquier espacio y diseño, lo que permite crear composiciones únicas, con diferentes colores y formas.
Otra ventaja que hay que mencionar es que, debido a su presentación en mallas, su instalación es bastante sencilla y rápida. Además, hay que añadir que cuenta con un gran poder aislante y presenta carencia de porosidad.
Finalmente, otra ventaja que hay que comentar es que el gresite puede contar con diferentes materiales en su composición, como es el caso de malla, que ya se ha dicho anteriormente, así como papel y PVC.