Desde siempre los equipos Mac han sido los más mimados en lo que hace a dispositivos informáticos se refiere, tanto para trabajar como para estudiar, por su equipamiento perfecto y por su insuperable ingeniería. Los ordenadores de Apple son sinónimo de buen rendimiento, tanto para quienes la utilizan duramente para trabajar, para el diseño gráfico, como para los gamers, pero son equipos y algunas veces fallan.
El servicio técnico debe ser confiable y cercano
Y cuando fallan se les debe llevar al servicio técnico a reparar, tanto sea un Macbook Air, un Macbook Pro, un Imac o cualquiera de los modelos de Apple, en el lugar más próximo como un servicio técnico de Castellon.
A pesar de la fortaleza de los equipos Mac, algunas veces debido el uso intensivo, pueden tener una serie de inconvenientes y estos dejan de funcionar. Ahí es donde entra en escena un servicio técnico para ordenadores MAC.
¿Cuáles son los fallos más comunes que pueden presentar los equipos Mac?
Los equipos Mac Air pueden presentar problemas de sobrecalentamiento y colgarse varias veces mientras se trabaja, por lo cual los técnicos deberán hacer una revisión previa para diagnosticar cuál es el problema que le afecta a cada aparato en cuestión. Puede ser que el daño sea en cables o periféricos sueltos, por lo que es preferible que un técnico recoja a domicilio el MAC para verificar estos problemas.
Un Imac está conectado siempre al circuito eléctrico de la casa, por lo que su flujo es constante, y fallos o sobrecargas en el mismo pueden causar también un desgaste en la electrónica interna del equipo. Los técnicos los desarman pieza a pieza, para comprobar una vez desmontados, que todas funcionen a la perfección o en caso contrario, detectar los fallos que presenten las piezas.
Los ordenadores Mac están compuestos de hardware de gran calidad. Para reparar un equipo Mac cada uno de sus componentes es probado minuciosamente por separado, hasta hallar aquel que funciona de forma incorrecta.
Los síntomas que se pueden observar cuando existe algún problema en el ordenador son:
- Disminución del rendimiento que normalmente tenía.
- Dificultad para encender el equipo
- aso en el inicio o arranque.
- Funcionamiento lento al cargar.
- La pantalla presenta parpadeos.
- Cuando carga, se cuelga.
Estos entre otros defectos deben servir de alerta porque anuncian un fallo grave, que deberá de ser solucionado a la mayor inmediatez posible.
Uno de las fallos más peligrosas para un equipo que funciona con componentes electrónicos es la humedad, que puede provocar daños en forma progresiva, y en un corto lapso de tiempo. Cuando el equipo está húmedo o se sospecha que se ha acumulado humedad dentro, se debe inmediatamente acudir al servicio técnico para su inspección, antes que el daño sea más grave.
La experiencia es muy importante
Los ordenadores de Mac son verdaderas joyas electrónicas, por este motivo no deben ser desarmados por personas que no tengan el conocimiento específico para hacerlo, pues se pueden provocar daños irreparables.
El equipo de profesionales que componen el servicio técnico tendrá en cuenta que si es una Macbook Pro, en caso de que no puedan repararse lo componentes dañados, se reemplazarán los originales que correspondan.
Uno de los mayores problemas que se detectan en el servicio técnico del equipo Mac, es la manipulación por parte de otras personas dentro de los equipos. Es altamente perjudicial para los componentes interiores de un ordenador Apple que se los intente reparar por cuenta propia. Muchas veces en el afán de hacer bien, se terminan estropeando piezas que no fallaban debido a dicha manipulación, extendiendo el daño y haciendo más alto el coste de la reparación.
Los componentes internos de los ordenadores Apple están diseñados para que su anclaje dentro de los delgados gabinetes sea perfecto, y si se los desarma en forma inexperta, se pueden dañar las conexiones cableadas haciendo que la vida de una Macbook se ponga en verdadero riesgo.
Mac cuenta con equipos concebidos para una larga duración, por lo que lo expuesto debe tenerse en cuenta también si se la debe llevar al servicio técnico en Alicante. Los servicios técnicos tienen experiencia de años en la reparación de los productos de Apple.
Son los productos elegidos por la mayoría de estudiantes y profesionales que exigen un gran rendimiento con un uso realmente intensivo. Por esta razón, en el campo de la tecnología, las Mac son verdaderas joyas, con una potencia capaz de soportar las más extremas solicitudes, capaces de estar días encendidas con un uso realmente intenso, sin siquiera re calentarse.
Reemplazar piezas solo cuando no tienen reparación permite costes más accesibles
Cuando se posee un equipo de tal talla, ante el primer síntoma que no es habitual en él, se debe consultar con el servicio técnico, todo esto con vistas a poder solucionarlo con la mayor premura y, además, la información que contiene en el proceso ya que habitualmente es sumamente delicada, y ha llevado mucho tiempo disponer de ella, ya sea tanto de trabajo o de estudio.
Muchas veces puede no funcionar el teclado, o la batería comienza a durar cada vez menos tiempo cargada. Otras veces puede ser que no se trate de un fallo, sino que se desea ampliar la memoria RAM o el SSD, y hasta mejorar el rendimiento con un cambio de placa.
En el servicio técnico especializado en los productos de Apple los expertos son partidarios de reparar los componentes en lugar de cambiarlos, por lo que siempre se trata de sustituirlos únicamente en el caso de que no tengan reparación.
El servicio técnico provee la solución a cualquier problema en forma eficiente, y con el presupuesto más ajustado y más económico del mercado. Proveen los presupuestos en 24 horas en forma gratuita, y de la misma forma proceden al retiro en el domicilio del cliente.
Estos servicios técnicos se especializan en los productos Apple, pero también reparan equipos de otras marcas, para los cuáles el proceso de diagnóstico cumple de la misma forma, testeando parte por parte hasta dar con el problema y la solución más adecuada, a través de la reparación del componente o de su sustitución en el caso de que el daño sea irreparable.