Las pieles grasas requieren una rutina de higiene y cuidados con productos que se hayan formulado específicamente, para abordar sus necesidades particulares y no contenga componentes sebosos que obstruyan los poros de la dermis. Y aunque la piel grasa produzca una gran cantidad de esto mismo, no significa que no deba hidratarse. Por lo que te daremos unas recomendaciones para hidratar la piel grasa.
¿Por qué hay pieles grasas?
Cuando la piel tiene un aspecto graso, sobre todo el área de la nariz, frente, mejillas y la región del pecho. Puede estar determinado por diversos factores; tales como: predisposición genética, cambios hormonales, edad, alimentación, estrés, el uso de determinados medicamentos o un cuidado inadecuado.
En este sentido, para hidratar este tipo de piel, lo recomendable es realizar una limpieza matutina y en la noche con productos específicos para pieles grasas y con tendencia acnéica. Dependiendo de tu preferencia, usa un gel limpiador o un agua micelar, acompañado de un jabón para tu tipo de piel.
Seguidamente aplica la loción hidratante, que lo ideal es que sea libre de aceites y que aporte agua. Por supuesto trata de realizar exfoliaciones por lo menos una vez por semana; esto te ayudará a purificar y mejorar la piel. Una alternativa que resulta favorable en las pieles grasas, son los sérums (especialmente los siliconados) o las ampollas.
Es recomendable que antes del maquillaje apliques un sérum regulador de la grasa. En este sentido, verifica con especial atención que todos los productos a utilizar contengan ingredientes, libres de aceite principalmente; y que favorezcan la renovación del tejido celular, para disminuir y/o evitar mayor daño en tu piel.
Un dato importante, es estar realmente seguro de tener un tipo de piel grasosa; ya que la dermis es un tejido delicado y podrías generar un efecto adverso al usar productos inadecuados. Te traería consecuencias negativas, aumentando el aspecto graso de la piel y obstruyendo los poros.
Cuidados al hidratar la piel grasa
Aunque tengas un tipo de piel grasosa, es vital usar protector solar; pues a pesar de que parezca que el sol seca o reduce los granitos, no es así, y puede inducir mas bien un brote de acné. De la misma forma, las cicatrices recientes de acné al exponerse al sol dejan unas manchas difíciles de eliminar.
Por otro lado, hay variedad de productos especialmente formulados para combatir la grasa en la piel del rostro. Uno de ellos son las toallas absorbentes diseñadas para el cutis graso; hay diversas marcas comerciales, y son útiles cuando estás en la oficina o en la calle y no tienes tiempo de realizar el lavado de tu rostro.
De igual forma existen en el mercado concentrados nutricionales que contribuyen a regular las imperfecciones; puesto que favorece la regulación de los episodios de estrés del organismo, disminuyendo los poros dilatados y la apariencia sebácea.
Otras sugerencias para hidratar la piel grasa
Nada como los componentes naturales para favorecer la hidratación en pieles grasas, las frutas y verduras representan una gran alternativa; ya que aportan cuantiosos nutrientes, minerales y proteínas que ayudan a regular el equilibrio natural de la piel, al disminuir la cantidad de grasa.
Todos estos beneficios los puedes aprovechar, incorporándolas en tu dieta diaria; y por otro lado, aplicándolas en forma de mascarillas y exfoliantes. Las adecuadas para el tipo de piel grasa son las cítricas (kiwi, tomate, limón, fresa, entre otras); que unidas a otros ingredientes naturales potencian su acción hidratante, y tendrás resultados impresionantes.
Cuando inicies la exfoliación es recomendable hacerla semanal; y a medida que disminuya el exceso de sebo en la piel, practicarla cada quince días y, por último, podrá reducirse a una exfoliación mensual. Así, limpias el cutis en profundidad, reduciendo la grasa e hidratándolo.