Una de las marcas más reconocidas por los caballeros, es la Rolex, cuya historia está enmarcada en la visión innovadora de su fundador Hans Wilsdorf, quien inauguró una empresa dedicada a la distribución de relojes.
Soñaba con la creación de un reloj ideal para llevar en la muñeca con un diseño elegante, además de características técnicas y estéticas fundamentales, con prestaciones confiables.
Pensó en elegir un nombre inédito, que se convirtiera en la marca, que fuese fácil de pronunciar, único e imponente, hasta que surgió la idea de Rolex en 1908, y Hans ideó el primer reloj hermético de pulsera llamado Oyster, reloj que al día de hoy es una referencia en materia de calidad y prestigio.
Desde ese momento, diseñó una amplia gama de relojes que se convertirían en iconos de la marca, la cual contempla un aparato industrial que abarca numerosos oficios, desde diseñadores, relojeros, ingenieros, y demás especialistas, que le aportan un valor incalculable.
¿Por qué la marca Rolex es sinónimo de calidad y prestigio?
Los relojes Rolex para garantizar la calidad y excelencia en sus productos, disponen de un centro de formación propio en Ginebra, encargado de la capacitación de sus trabajadores, cuyo objetivo es potenciar nuevos talentos y ofrecer la colaboración continua a sus empleados, garantizando la formación de sus aprendices.
La filosofía de su fundador no solo apuntaba el éxito de la empresa, sino el bienestar y crecimiento de sus empleados y trabajadores. De esta manera la marca figura como ejemplo para las futuras generaciones.
Año tras año la marca continúa elaborando relojes con tecnología de punta, incorporando elementos innovadores, que han definido la identidad de los modelos de colección, brindándole una excelente reputación, basada en la precisión y confiabilidad que poseen sus productos, sin olvidar la elegancia de la pieza trabajada.
¿Cómo han evolucionado las colecciones de relojes?
Después de haber incursionado en el mercado con sus formas distintivas en la década de 1940, hasta hoy, han evolucionado paulatinamente incorporando novedosas tecnologías y nuevas funcionalidades. Un reloj de la marca se distingue de los demás al instante, ya que son piezas únicas de gran valor económico.
El diseño del Oyster de la marca Rolex, en la actualidad tiene en su haber quince gamas, entre las cuales se destacan, los clásicos:
- DateJust
- Day – Date
- Sky – Dweller
- Oyster Perpetual.
Los profesionales para actividades puntuales como:
- Explorer
- Submarine.
- Cosmograph Daytona.
- GMT – Master II.
¿Cómo elegir el mejor reloj?
Resulta ideal elegir una marca que demuestre con el paso de los años, que sus relojes son confiables a pesar de ser sometidos a las condiciones más extremas, los cuales deben ser precisos y funcionales en la montaña más alta, los océanos más profundos, surcando los cielos, y hasta en las competiciones de carreras, tal como sucede con la marca de relojes Rolex.
La marca fabrica todos los componentes internos de sus relojes, siendo pionera en el sector relojero, ya que tiene en su haber más de 500 patentes registradas.
Cada reloj es diseñado y elaborado con las mejores piezas y ensamblados bajo los más estrictos estándares de calidad.
El oro es uno de los metales preciosos de mayor valor económico utilizado como aleación para sus diseños, lo que convierte a la marca en única, ofreciendo elegancia, distinción y excelencia.
¿Cuáles son los nuevos modelos de Rolex 2021?
La nueva generación de relojes Rolex se presenta con la combinación de acero Oystersteel y oro amarillo.
El Explorer II presenta una caja y brazalete con nuevo diseño.
El Datejust 36 incorpora esferas nuevas en colores luminosos y llamativos.
Los nuevos diseños del Cosmograph Daytona incorporan esferas de meteorito en oro de 18 kilates.
Y para las damas, el Lady – Datejust incorpora 1089 diamantes lo cual lo convierte en una joya preciosa.
De tal manera que, elegir un reloj de marca reconocida, es tener la seguridad y confianza, de contar con una pieza de diseño único e impecable, fabricado bajo los más altos estándares de calidad, con metales y gemas de gran valor económico, lo que convierten al reloj en una joya que denota elegancia y prestigio, a la vez que ofrece fiabilidad y precisión en sus prestaciones.