Pasar por un litigio, sea del tipo que sea, es algo que nos roba horas de sueño. No es para menos: toda nuestra integridad económica se pone sobre la mesa en caso de que salgamos perjudicados en una sentencia judicial. Mucha gente piensa que dichas situaciones son algo fuera de lo común; no obstante, hay conflictos personales que consideramos leves y que nos pueden llegar a hacer pasar por este tipo de procedimientos. Por consiguiente, informarse adecuadamente y recurrir a abogados de alto nivel son acciones fundamentales que nos ayudarán a salir indemnes del problema que estemos sufriendo en cada caso.
Qué pasa si debes 300€ y no puedes pagar
La crisis económica ha afectado a los bolsillos de la mayor parte de la población y esto ha provocado que surjan todo tipo de disputas financieras en el camino. Hasta la más pequeña de las cantidades se puede reclamar y, si sientes que es injusto que te pidan dicho capital, debes protegerte de la mano de los mejores profesionales. Por ejemplo, ¿sabías que te pueden llevar a juicio por una deuda de 300 euros. Es improbable, sí. Pero también es posible. Debido a ello, nuestro consejo es que el primer paso que des sea el de informarte sobre todo lo asociado a este tipo de litigios.
Siempre y cuando la deuda sea monetaria (un bien por valor de 300€ no es válido) se te puede reclamar la cantidad por la vía judicial. Ahora bien, para que lo hagan deben poder justificar de manera documental que efectivamente debes este capital y que había una relación comercial con la parte demandante. Asimismo, la deuda debe haber vencido la fecha de pago, la cual está fijada a los cinco años siempre que no hubiera un plazo de prescripción.
Si se reúnen todas estas situaciones, es posible que te lleve a juicio para cobrar lo que se le debe. No obstante, si estás pasando por circunstancias difíciles y eres insolvente, siempre que tengas una buena gestión legal de por medio, puedes salir indemne del conflicto. Con todo esto en mente, queremos señalar que, al no superar los 6.000€ de deuda, el demandante primero requerirá el pago por un proceso verbal. Una fase de comunicación en el que puedes intentar alargar la fecha para abonar la cantidad o renegociar la deuda. Aunque, si crees que es injusto que se te pida el dinero, por poco que sea, no cedas y utiliza los recursos legales pertinentes para defenderte.
La importancia de delegar el caso en las manos adecuadas
Ya hemos visto que no hay una cantidad mínima para que alguien te lleve a juicio, aunque es tal la complicación que ello requiere que puede que nunca llegue a suceder. Sin embargo, desde el mismo momento en el que presenten la reclamación en tu contra, te recomendamos que acudas a un buen bufete de abogados. En estos despachos estudiarán tu caso de forma detallada para asegurar que todo se resuelva de la forma más satisfactoria según tus intereses. Porque no siempre hay que pagar el dinero que se debe oficialmente: hay muchas circunstancias que se deben tener en cuenta.
Es posible que quien te está pidiendo el dinero sea consciente de que no tiene derecho a hacerlo. Sin embargo, por el mero hecho de lo intimidatorio que es presentar una reclamación de estas características, busque que te plantees si quizás es más sencillo abonar la cantidad y dejarte de problemas. No lo hagas. Con un buen equipo de abogados saldrás indemne de esta situación sin que tu bolsillo sufra perjuicio alguno.
Así pues, el papel de los abogados es fundamental para solventar cualquier tipo de litigio por el que estés pasando. Es irrelevante si hay mucho dinero o no en juego: lo único que importa es la justicia y que todo se resuelva tal y como dicta la ley. Por consiguiente, lo mejor es que analices en detalle a las empresas de este sector y que te dejes asesorar por quienes se han ganado un encomiable prestigio en el mundo del derecho.