Tener un bebé es tal vez la experiencia más bonita que puede tener una mujer en su vida. Sin embargo, actualmente para muchas mujeres, debido a su situación laboral, de pareja, características familiares, etc., se hace más difícil tener niños y quieren esperar o, cuando finalmente se lo proponen, tienen dificultades para lograrlo de forma natural.
Afortunadamente, la investigaciones y el avance científico actual permiten que estos problemas tengan solución en un amplio porcentaje de los casos. Por ejemplo, para aquellas mujeres que quieren tener hijos, pero que lo tienen más complicado por causas como el síndrome de hiperestimulación ovárica o la baja respuesta, la vitrificación, una técnica de congelación ultrarrápida en la que se sumergen los óvulos o los embriones en nitrógeno líquido a -196 ºC, se convierte en un aliado imprescindible para conseguir la gestación que podremos realizar en Barcelona IVF.
Esta técnica permite que la congelación de óvulos y embriones en estado de blastocisto sea posible con buenos resultados y evita el daño celular aumentando la tasa de supervivencia en la descongelación. Así, optimiza las estrategias en reproducción asistida en casos que antes eran complicados de manejar aumentando el éxito de las tasas de posterior embarazo.
Cuándo optar por la congelación de óvulos y pruebas necesarias
Las técnicas de preservación de fertilidad deben ser la opción de toda mujer tanto si desea posponer su proyecto reproductivo o en aquellos casos en los que vaya a recibir un tratamiento que pueda afectar a su capacidad reproductiva. No todas las mujeres pueden hacerlo, pues hay que estudiar su edad, que no debería muy superior a los 35 años, así como su reserva ovárica, que es la capacidad de los ovarios para producir óvulos tras ser estimulados y depende de cada caso individual, por lo que debe ser analizada en casos de mujeres con baja reserva ovárica.
La reserva ovárica está determinada genéticamente y para analizarla existen distintos test, entre los que destacan los siguientes por su mayor efectividad:
1.-Hormona antimülleriana (AMH). Se produce en el ovario y refleja la cantidad de folículos disponibles. Permite valorar tanto la baja reserva ovárica como el riesgo de hiperestimulación en un tratamiento. Tiene la ventaja de que se puede determinar en cualquier momento del ciclo.
2.-Recuento de folículos antrales por ecografía. Se realiza al principio del ciclo y muestra los folículos que están preparados para responder ante una estimulación hormonal en ese ciclo. Se realiza fácilmente en la consulta con una ecografía.
3.-FSH y estradiol basales. Se realiza siempre al inicio del ciclo y es necesario determinar ambas hormonas para poder valorar la reserva ovárica. Tiene la desventaja de que hay que esperar a un momento determinado del ciclo para realizar la analítica. Aunque sus valores pueden variar entre ciclos el pronóstico vendrá determinado por el resultado más alto de la FSH.
Todos los pasos en el tratamiento de vitrificación
En clínica Barcelona IVF, sus profesionales sanitarios expertos en fertilidad y congelación de óvulos en España podrán asesorarnos, en función de nuestra edad y características, sobre cuál es tratamiento de fertilidad más recomendado para nosotras. En el caso de que sea la vitrificación, el primer paso es la obtención de los óvulos mediante un tratamiento de estimulación y punción de los ovarios similar al realizado en una fecundación in vitro (FIV). Posteriormente, los óvulos obtenidos se congelarán mediante la técnica de vitrificación y podrán mantenerse en este estado durante el periodo de tiempo que sea necesario, sin que esto afecte a su calidad.
El último paso, en el caso de que queramos utilizar nuestros óvulos, es la descongelación de los mismos en el laboratorio para ser fecundados con semen de la pareja o de donante. Los embriones obtenidos se mantendrán en cultivo para ser transferidos cinco días después y los embriones que no se transfieran serán congelados. Deberemos preparar nuestro endometrio con un tratamiento hormonal sustitutivo con estrógenos y progesterona para recibir los embriones.
Con respecto a las tasas de éxito de la fecundación in vitro tras la realización de este método, hay que tener en cuenta que dependen principalmente de la edad de la mujer, siendo de más de un 50% hasta los 39 años y disminuyendo progresivamente a partir de esta edad. En la Sociedad Española de Fertilidad podremos consultar más datos sobre tasas de éxito de distintos tratamientos de fertilidad.
En Barcelona IVF disponen de un laboratorio de reproducción asistida de alta calidad en el que se aplican los últimos avances tecnológicos: el IMSI, el embryoscope y el cultivo a blastocisto, que realizan en más del 95 por ciento de todas las transferencias embrionarias. Su sólida experiencia les sitúa al más alto nivel de calidad para obtener las mejores tasas de embarazo. Si tu deseo es tener un bebé ahora o en un futuro y quieres conocer las posibilidades y el mejor tratamiento para ti, asesórate con sus profesionales sanitarios.