La minería de Bitcoin, una faceta crítica del ecosistema de criptomonedas, ha vuelto a captar la atención.
Hoy temprano, el criptoanalista “Crypto Rand” destacó un aumento significativo en la dificultad de la minería de Bitcoin, un aumento de más del 30% desde el 13 de enero de 2023.
Y hace unas horas, el intercambio de criptomonedas más grande del mundo por volumen de negociación señaló que la dificultad de minería de Bitcoin alcanzó un máximo histórico de 48,71 billones.
Y como puede ver en el cuadro a continuación, son correctos:
Este aumento sustancial justifica un análisis más detallado del concepto de dificultad de minería de Bitcoin, su medición, su influencia potencial en el precio de Bitcoin y sus implicaciones para los mineros a pequeña escala.
Bitcoin Mining Difficulty mide la complejidad de los problemas matemáticos que los mineros deben resolver para agregar un nuevo bloque de transacciones a la cadena de bloques. El nivel de dificultad se ajusta aproximadamente cada dos semanas para mantener una tasa de descubrimiento de bloques aproximadamente cada 10 minutos, independientemente de la potencia informática total dentro de la red. Este nivel aumenta con más mineros y disminuye cuando los mineros se van para garantizar un ritmo de minería constante.
El aumento reciente del 30% en la dificultad se puede atribuir a varios factores. Principalmente, una afluencia de mineros impulsada por la alta capitalización de mercado de Bitcoin podría aumentar la competencia, aumentando aún más la dificultad. Además, los avances en la tecnología de hardware de minería pueden aumentar la potencia computacional general de la red, aumentando así el nivel de dificultad.
En particular, la dificultad de la minería puede influir indirectamente en el precio de Bitcoin. Cuando aumenta la dificultad y aumentan los costos de minería, los mineros pueden vender sus recompensas de Bitcoin para cubrir estos costos, lo que podría aumentar la oferta del mercado. Si la afluencia de la oferta no se corresponde con la demanda, el precio puede verse presionado a la baja.
Sin embargo, un mayor nivel de dificultad también podría indicar una red sólida y segura, atrayendo a más inversores y potencialmente elevando el precio de Bitcoin. Es un equilibrio delicado y la correlación no siempre es directa, lo que lo convierte en un aspecto fascinante del seguimiento de la dinámica del mercado de Bitcoin.
Para los mineros a pequeña escala, un aumento en la dificultad puede plantear desafíos importantes. A medida que aumentan los costos operativos, la rentabilidad puede volverse esquiva, obligándolos a cesar sus operaciones. Por lo tanto, la observación de Crypto Rand subraya la necesidad de que los mineros sigan el ritmo de estos cambios.
Historia original publicada en CryptoGlobe