Las úlceras por presión, también conocidas como escaras o llagas por presión, son áreas de la piel que se lesionan como consecuencia de permanecer demasiado tiempo en una misma posición. Es por ello que son tan comunes en personas que deben permanecer en cama por períodos prolongados de tiempo, y si no se tratan de forma adecuada, pueden llegar a ser verdaderamente dolorosas y complicadas de curar. Es por ello que el objetivo siempre será hacer todo lo posible por evitar la aparición de las mismas.
Aunque una persona deba permanecer en cama por un período prolongado de tiempo, hay formas de evitar la aparición de las úlceras por presión. Hoy en día, además, contamos con complementos imprescindibles para ello, como es el caso de colchones especiales, cremas y técnicas para movilizar a la persona en cuestión, siempre con el objetivo de evitar el desarrollo de las escaras.
¿Cómo evitar la aparición de las úlceras por presión?
Como comentamos anteriormente, hoy en día contamos con una variedad de complementos interesantes para evitar el desarrollo y la aparición de las úlceras por presión o escaras. Es importante recordar que las úlceras suelen aparecer, principalmente, en las áreas donde los huesos están ubicados más cerca de la piel, como puede ser el caso de las caderas y los tobillos.
Por otro lado, la prevención de este tipo de lesiones es de suma importancia, porque después de que aparecen, resulta más complicado tratarlas, y pueden causar infecciones que pueden llegar a poner en peligro la vida de la persona; de ahí la importancia de enfocar todos los esfuerzos en prevenir. Afortunadamente, además de las técnicas de movilidad, hoy en día contamos con complementos sanitarios esenciales que facilitan esa tarea.
A continuación compartimos algunos de los más destacados al respecto.
- Hidratación y dieta
La dieta es de suma importancia para fortalecer el sistema inmune, es por ello que resulta esencial que una persona que se encuentre en cama, atravesando una situación de salud complicada, reciba una dieta rica en proteínas y un buen nivel de hidratación. En este sentido, conviene recordar la importancia de las proteínas para la regeneración y el desarrollo de los músculos.
Cuando la alimentación no es equilibrada y adecuada, una de las consecuencias principales es el debilitamiento de la piel, lo que se traduce en muchas más posibilidades de sufrir escaras. Por supuesto, dependiendo de la situación de cada paciente, el médico indicará cuáles son los parámetros alimenticios a seguir.
- Colchón antiescaras
El uso de colchonetas antiescaras es determinante para prevenir la aparición de este tipo de lesiones. Este tipo de colchones o colchonetas, funcionan bajo un sistema de superficies especiales de gestión de la presión, lo que permite minimizar o reducir el desarrollo de escaras.
Este tipo de colchonetas son flexibles y los conductos de aire se inflan de manera alternativa, lo que ayuda al proceso de cicatrización, en el caso de que las escaras ya hayan aparecido, así como también ayuda a prevenirlas. Gracias a este modo de funcionamiento, se evita ejercer presión en la misma área del cuerpo de forma continua, lo que contribuye a la aparición de lesiones.
- Higiene
Es esencial mantener una buena higiene corporal de los pacientes, por lo que deben ser aseados de forma adecuada y utilizando los mejores productos, como mínimo, una vez al día. Para ello, siempre se debe utilizar un jabón neutro con extremo cuidado sobre la piel, comprendiendo la delicadeza y la debilidad de la misma. Adicionalmente, resulta esencial cambiar la ropa de cama de forma regular.
- Masajes e hidratación
Es importante mantener la piel perfectamente hidratada, para ello, es ampliamente recomendable hacer suaves masajes sobre la piel limpia y sin ejercer presión. Lo ideal es utilizar cremas hidratantes que permitan el deslizamiento de los dedos sobre el área, sin lastimar. También se pueden utilizar aceites, pero lo importante, es optar por productos que respondan a las necesidades específicas de la piel.
- Cambios de posición
En el caso de pacientes que deban estar de forma constante en la cama, resulta esencial hacer ejercicios de movilidad y cambiarlos de posición cada dos horas, para variar los puntos del cuerpo que reciben más presión. Contar con asesoría profesional para ello, resulta de gran utilidad para hacer los ejercicios más indicados en función de la situación particular de salud de cada persona.
En el caso de personas que tengan una mayor movilidad, es importante impulsarlos para movilizarse, dentro de su cuadro clínico, el máximo posible. Además, la movilidad es un factor clave para que los músculos no se vean atrofiados.
Grados de las escaras
Existen varios grados de escaras, y dependiendo de esos grados, también dependerá la evolución de las mismas. Sin embargo, como comentamos anteriormente, el objetivo es lograr evitar el desarrollo de las escaras.
Pese a ello, cuando aparece una escara, es importante saber identificarla, porque en función de ello dependerá el tratamiento a seguir para poder eliminarla.
A continuación compartimos cuáles son los grados y la evolución de las escaras:
- Grado I: este nivel hace referencia a cuando aparece el enrojecimiento en la piel; sin embargo, la misma desaparece por sí sola después de cambiar a la persona de posición, y por ende, después de cambiar el área de presión.
- Grado II: las escaras de este nivel son muy parecidas a una ampolla o abrasión, y se generan como consecuencia de la pérdida parcial del grosor de la piel. También puede afectar a la epidermis.
- Grado III: este tipo de lesión se genera cuando se ha perdido, de forma completa, el grosor de la piel en el área afectada. Se traduce en la muerte del tejido subcutáneo, e incluso puede llegar a ser una lesión más profunda. En este caso, se genera una capa negra mucho más dura, que se produce por la necrosis, la cual puede evolucionar, rápidamente, hacia una úlcera infectada.
- Grado IV: este es el nivel más grave, y básicamente, es cuando aparece un cráter. Este tipo de lesión puede generar problemas mucho más graves, como puede ser el caso de un daño óseo y muscular.
Los consejos anteriores son clave para prevenir la aparición de las escaras. Adicionalmente, al hacer los ejercicios de movilidad y los cambios de posición, es importante hacer una evaluación rápida de las diferentes áreas del cuerpo, para que, en caso de estar generando una escara, evitar la evolución de la misma; porque cuanto más profunda sea, más difícil de tratar será y más peligro puede representar para la salud del paciente.