Generalmente al comprar zapatos, solemos probarlos en la tienda y a pesar de que los sintamos cómodos y acordes en talla; puede pasar que cuando lo uses para la ocasión pautada te queden algo justos o te molesten en la parte de los talones o en los dedos, que hasta podrían salir ampollas por el roce
Si quizás los zapatos fueron un obsequio, y por lo tanto no te los mediste antes de tener que usarlos; o simplemente son tus zapatos favoritos o los de tu hijo y ya les están quedando apretados, como no vas a impedir el crecimiento del pie; si puedes tratar de ampliar un poco el zapato para que lo usen por más tiempo
Para lograrlo hay varias maneras muy sencillas que te podrían ayudar, una de ellas es: tomar unas bolsas plásticas, verifica que no estén rotas, y llénalas con agua (no tanto para que puedas anudarlas bien o si son de clip presiónalas bien); el tamaño de las bolsas debe ser acorde a los zapatos (de adultos: grandes y niños: pequeñas)
Seguidamente introduce las bolsas dentro de cada zapato y moldéalas bien para que entren totalmente, teniendo cautela de no romperlas. A continuación los metes en el congelador durante toda la noche o hasta que se congele el agua; procedes a sacar los zapatos y esperas que se derrita el hielo, para sacar las bolsas
Deberían estar más desahogados, ya que al congelarse el agua se abomban las bolsas, aumentando su tamaño y por ende agranda los zapatos; tal cual si los colocaran en una horma de zapatero. Igualmente está la opción de usar una cucharilla grande, utilízala para aflojar el zapato por dentro en cada zona; haciendo énfasis en las áreas donde te moleste o apriete el zapato
Otras opciones para agrandar los zapatos
La siguiente opción es más recomendable si los zapatos son de cuero o algún estilo clásico, que sean delicados. Toma varios calcetines enrollados e introdúcelos dentro de cada zapato hasta rellenarlos totalmente, y que queden bien presionados; déjalos así toda la noche o hasta que los necesites usar, de este modo lograras ampliarlos un poco
El clásico periódico húmedo, es súper efectivo para ayudar a ensanchar los zapatos, para esto solo humedece hojas de periódico y forma pelotas, seguidamente ubícalas dentro de cada zapato ocupando todo su interior amoldándolo a la forma del zapato; para que cuando se seque el periódico mantenga la forma original y solo quede mas agrandado
Esta técnica es ideal en zapatos de tela, pero no en los de cuero. Los copos de avena, arroz o granos húmedos, del mismo modo favorecen para agrandar zapatos; utiliza una bolsa y pon en su interior alguno de esos cereales con agua suficiente para que los cubra, procede a sellar la bolsa y métela dentro del zapato
Recuerda ocupar todo el espacio interno del zapato uniformemente, puedes dejarlos toda la noche para que surta efecto. Otra manera es ponerte los zapatos en la casa por 1 hora varias veces durante el día, para que los vayas adaptando y anchando; ve aumentando progresivamente el tiempo hasta que logres sentirte bien con ellos para salir
Medias gruesas y secador de cabello, ponte un par de medias que sean bien gruesas, mete los pies en los zapatos y seguidamente colócales el secador a velocidad media durante unos 20-30 segundos; en cada zona del zapato para que se caliente y amolde a tus pies, espera a que se enfríen y puedes repetir la operación una vez más si es necesario
Existen también aerosoles, diseñados específicamente para estirar los zapatos