En la sociedad actual, son muchas las personas que no se sienten especialmente a gusto con alguna parte de su cuerpo y desean cambiarla. Modificar nuestra apariencia requiere someterse a una intervención de cirugía plástica, lo que puede derivar en graves consecuencias si no se ha elegido a un buen cirujano, como puede ocurrir en una operación de pecho en Madrid. En estos casos, la elección de un profesional cualificado ofrecerá amplias garantías de éxito. Sin embargo, escoger a un buen profesional puede ser una tarea de lo más complicada. Por ese motivo, es de vital importancia tener en cuenta una serie de claves que faciliten esta labor.
Lo más habitual es que los pacientes elaboren una lista de posibles cirujanos plásticos, cuyos nombres suelen aparecer por recomendaciones de familiares, amigos o médicos. Sin embargo, es primordial acreditar que los posibles candidatos cuenten con la experiencia adecuada para llevar a cabo la operación y, por supuesto, se encuentren en posesión del título en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora. Para ello, se podrá acudir a la SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética), la cual posee una base de datos con los contactos de todos los profesionales titulados en cada provincia.
Se debe tener especial cuidado con aquellos cirujanos plásticos que afirman haber adquirido su título en otros países y no aparecen en la SECPRE, ya que es posible que no estén verdaderamente formados o no se encuentren acreditados para ejercer en España. Del mismo modo, es conveniente asegurarse de que todo el personal médico que trabaja con el cirujano plástico en la clínica posee su titulación correspondiente. Esto será posible comprobarlo al visitar el centro hospitalario. De esta manera, se podrá atestiguar también que el lugar cuenta con todos los controles sanitarios pertinentes y entablar una conversación con el posible cirujano plástico.
Esta visita informativa servirá para decantarnos al final por un cirujano concreto. Es importante que se construya una relación de confianza entre el cirujano y el paciente. De ese modo, se podrá exponer nuestro caso y recibir, en cambio, toda la información pertinente y detallada acerca de los procedimientos quirúrgicos, los posibles riesgos, el postoperatorio, etc. Este es el momento perfecto para que el cirujano plástico responda a todas las preguntas del paciente. Asimismo, en la primera consulta el cliente deberá realizarse un examen de la zona a tratar así como un historial clínico completo con el fin de que el cirujano obtenga la mayor información sobre él.
El paciente siempre tendrá que firmar un consentimiento donde se informe de todo lo relacionado con la operación, el procedimiento llevado a cabo y los posibles riesgos que puede conllevar. En caso de que la clínica no expida este documento, lo más conveniente es decantarnos por otro profesional. Del mismo modo, es necesario asegurarse que el postoperatorio y todos los cuidados que vaya a necesitar el paciente sean realizados por el propio cirujano plástico o, por ende, por un personal cualificado bajo las órdenes de este. sin embargo, lo más importante es no precipitarse a la hora de elegir. Es importante reflexionar con toda la información proporcionada y seleccionar cuando se sienta preparada.