Informes realizados demuestran que los precios de la luz y la electricidad han aumentado hasta en un 60% en la última década. El precio se ha elevado en toda Europa, pero la subida en España ha sido mayor que la media registrada en los países de nuestro entorno, hasta un 50% más cara.
El incremento del importe en la factura de la luz es algo que preocupa a todos los consumidores, y por ello es cada vez más común optar por diferentes alternativas para controlar dichos consumos. Y aunque lo cierto es que hay consumos en casa que resultan más difíciles de evitar o controlar, como el uso de electrodomésticos u otros aparatos electrónicos, siempre es importante conocer cómo funciona el sistema energético de nuestra casa, saber calcular el consumo y elegir la correcta potencia de energía contratada.
Si hablamos del consumo medio de cada vivienda, este dependerá del número de personas que vivan en casa, siendo la media de un hogar español entre 2 y 3 personas, por lo que la factura media cada dos meses se sitúa entre los 106€ y los 118€.
Factores que aumentan el precio de la luz
Cuando se produce una subida en el precio de la electricidad, algunos de los factores determinantes pueden ser causas como la meteorología. Y es que tanto la sequía como la falta de viento que sufren últimamente muchos países, han provocado que se tenga que recurrir a otros suministros energéticos más caros.
De la misma manera pasa cuando se producen olas de frío o de calor. La subida en la demanda de la calefacción o el aire acondicionado provocan un aumento en el precio.
Otro factor es el precio que las eléctricas pagan por emitir dióxido de carbono. Existe un mercado europeo de derechos de emisión, y el precio de estos derechos ha aumentado considerablemente desde 2018, después de que la Unión Europea anunciara su intención de reducir su cantidad a partir de 2019.
También resulta decisiva la inestabilidad política internacional, que hace que las materias primas necesarias para generar energía se vean afectadas por conflictos determinados, lo que crea un aumento de los costes de producción.
En este sentido, España es de los países con la tarifa más alta. Hasta 2019 ocupaba la quinta posición, superada por Irlanda, Alemania, Bélgica y Dinamarca. Pero en el segundo trimestre de 2020, nuestro país se situaba en el segundo puesto más alto, sólo superado por Italia. Lo cierto es que, después de saber todo esto, puede que barajes la posibilidad de cambiar tu contrato. En este sentido, con OVO cambiar de compañÃa eléctrica es muy fácil, pues ofrecen la energía a precio de coste, limitándote a pagar el precio real de esta en el mercado, lo que sin duda hará que tu factura se adapte mucho más a la realidad de tus consumos.
¿Cómo se calcula el consumo eléctrico de una casa?
Como se aprecia, el mercado energético es complejo y eso se debe a la multitud de condicionantes que influyen a la hora de fijar los precios. También la zona geográfica en la que se encuentre la casa hace que la factura varie. Por ejemplo, el área mediterránea tiene un consumo más bajo que el resto de zonas, mientras que en el sur vemos lo contrario.
Para calcular el consumo del hogar, hay que tener en cuenta dos términos importantes que hay que saber diferenciar. El primero es el concepto de energía, y el segundo el de potencia contratada.
El término de energía es el precio de la luz, que se mide en kilovatio por hora. Este precio viene dado por una subasta en la que las compañías compran a las generadoras eléctricas de cada país, para después venderlo a sus consumidores.
Por su parte, la potencia de luz contratada tiene una relación estrecha con el número de personas, las dimensiones de la vivienda, el uso de aparatos eléctricos y los hábitos de consumo en cada hogar. Lógicamente, a mayor número de electrodomésticos y aparatos electrónicos que utilicemos a la vez, mayor potencia contratada necesitaremos. O bien, aunque no se utilicen todos a la vez, siempre debemos tener presente que cualquier aparato conectado a la corriente eléctrica -incluso en stand by– supondrá un gasto de electricidad que sumar a nuestra factura mensual. Tener todo el día encendidos los televisores, ordenadores o videoconsolas como la nueva PlayStation 5 que tan demandada hemos visto en estas últimas semanas, puede traernos algún que otro dolor de cabeza a final de mes.
Así bien, teniendo en cuenta los factores anteriormente mencionados, la fórmula para calcular nuestro consumo eléctrico es potencia x tiempo de uso = energía consumida. Una fórmula sencilla que nos permitirá tener un poquito más claro lo que consumimos actualmente, de modo que podamos adaptar nuestros hábitos buscando nuevas formas de ahorro.