Lee aquí qué debes tener en cuenta para elegir una silla cómoda con la que trabajar desde casa sin sufrir molestias de espalda ni cuello.
Cómo elegir la silla perfecta para trabajar desde casa
Desde los inicios de la pandemia del COVID, muchos trabajadores se han visto obligados a trabajar desde su casa. Un ejemplo han sido los integrantes del equipo de atención al cliente de los casinos online Colombia 2021, que desempeñan sus tareas diarias a través de una conexión remota a los equipos de su oficina.
Tony Sloterman, propietario de una empresa de búsqueda de bonos para casinos online, conoce bien esta situación. Todo su personal ha sido habilitado a trabajar de manera remota para garantizar su salud y minimizar las posibilidades de contagio.
Aunque esto está trayendo otros problemas que suelen pasar desapercibidos: la ergonomía de mesas, sillas y equipos informáticos. En muchos casos, los trabajadores utilizan portátiles, que obligan a mantener una postura encorvada, se sientan en sillas con alturas inadecuadas, o trabajan desde un sofá con el ordenador encima de las piernas. Todos estos hábitos pueden dar lugar a dolores de espalda y cuello a largo plazo.
Si trabajas desde casa, es importante que te hagas con una silla adecuada, en la que puedas sentirte cómodo durante varias horas y sin poner en riesgo tu salud. Aquí puedes encontrar los 3 aspectos que debes tener en cuenta para elegir tu silla de trabajo.
El respaldo
Es importante que no sea rígido y que sea ligeramente curvo, para dar soporte a las lumbares y permitirte estar sentado en una postura lo más natural posible, sin forzar la espalda. Idealmente, debería ser regulable para ajustar la posición perfecta para ti. En caso de que no sea así, deberías probar la silla antes de comprarla para asegurarte de que su diseño se adapta a tu espalda.
También debería contar con un soporte cervical, ya sea integrado en el propio respaldo o como un anexo a este.
Los apoya-brazos
Deben ser regulables y permitirte situarlos a la altura de la mesa. Su misión es dar soporte a tus antebrazos para evitar tenerlos en el aire todo el rato. Son especialmente importantes al trabajar en mesas pequeñas, que dejan el teclado del ordenador muy cerca del borde, impidiendo que los antebrazos descansen en la propia mesa.
Según los expertos en ergonomía, los codos deberían mantener una flexión de unos 90 grados cuando trabajas en tu ordenador. Y los apoya-brazos te ayudarán a conseguirlo. También te permitirán ajustar tu postura y desplazar momentáneamente el peso de tu espalda y glúteos a tus brazos para tomar pequeños descansos y cambiar de postura unos segundos.
La altura de la silla
Cuando la altura de la silla es la adecuada, puedes apoyar las plantas de ambos pies en el suelo y estos forman un ángulo de 90 grados con el tobillo. Lo mismo ocurre con la articulación de la rodilla y con la articulación formada por espalda y piernas.
Si no puedes mantener esta postura en alguno de estos puntos, la silla es demasiado alta o demasiado baja. Comprando una de altura regulable tendrás la seguridad de que puedes colocarla a la distancia óptima del suelo.