Enrique Peña Nieto, el presidente de México entre 2021 y 2018, se siente cada vez más a gusto en España. El pasado 5 de octubre renovó su “visa dorada” por 5 años más, luego de solicitarla inicialmente en 2020.
Aunque no salió inmediatamente de su país luego de culminar el período presidencial, como hicieron otras personas de su gabinete, entre 2019 y 2020 esta idea se fue afianzando en su mente.
Luego de intentar sin éxito obtener una visa especial gracias a su condición de exmandatario, optó por solicitar la visa dorada, que se otorga a inversionistas y emprendedores que quieran radicarse en España. Por ahora, Peña Nieto explica que se siente a gusto en este país y planea radicarse en él.
Así como él, muchos mexicanos toman la decisión de venir a España y residenciarse en el país, gracias a los distintos mecanismos existentes para otorgar visas y permisos de trabajo.
Ya sea por las condiciones laborales o económicas, que son más favorables en este país, o por querer expandir un negocio, la cantidad de mexicanos con ganas de realizar este viaje y mandar dinero de México a España es numerosa.
Estos viajantes, al igual que Peña Nieto, no buscan residenciarse permanentemente en España, sino que realizan viajes ocasionales a México, ya sea por vacaciones o para visitar a sus familiares y atender sus negocios.
¿Qué es la visa dorada?
La visa dorada, que obtuvo Peña Nieto en 2020, es un permiso de residencia y trabajo que otorga el gobierno español a los extranjeros que inviertan o apoyen de alguna forma el sistema económico nacional. Las inversiones permitidas por la ley van desde los 500.000 € hasta los 2.000.000 €.
Este tipo de permiso fue instituido en España en 2013 por el gobierno de Mariano Rajoy, para atraer inversionistas y emprendedores al país. Para ser elegible, las personas deben adquirir un inmueble de un costo mínimo de 500.000 €, como hizo el expresidente mexicano.
Las otras opciones para ser elegible para la visa dorada son: una inversión de 1.000.000 € en empresas españolas o depósitos bancarios o una inversión de 2.000.000 € en la deuda pública nacional.
Esta visa permite a los solicitantes residir, trabajar o estudiar en el país durante dos años, luego de los cuales puede extenderse por cinco años más. Luego de este tiempo, puede solicitarse la residencia permanente.
Aparte de la visa dorada, los mexicanos no necesitan una visa especial para ingresar a España o a cualquier otro país del espacio Schengen, siempre que la visita no supere los 90 días y no se realice ninguna actividad comercial.
En caso de querer permanecer por más tiempo en España, hay otras visas que es necesario solicitar. Si no se viene a trabajar, puede solicitarse la visa de residencia no lucrativa. Para esto, se debe mostrar que se dispone de suficientes medios económicos para la manutención durante el tiempo de la estadía. Esta visa tiene una duración máxima de un año y puede extenderse dos años más.
Las personas que quieran residir y trabajar en el país pueden elegir entre el permiso de trabajar por cuenta propia o por cuenta ajena, en caso de que vayan a laborar de manera autónoma o para algún empleador español.
El proceso para solicitar estos distintos tipos de permisos son más complejos que la visa dorada, y el trámite toma más tiempo. Sin embargo, el monto de inversión es mucho menor. Además, la visa dorada no exige un tiempo mínimo de estadía en el país, por lo que las personas que la obtengan tienen más libertad para viajar a su país de origen.
¿Por qué las personas de América del Sur eligen España para vivir y trabajar?
España es uno de los principales destinos para las personas que emigran de América del Sur, muy por encima de otros países de la región europea. Esto se debe principalmente a las similitudes culturales que existen entre este país y el continente suramericano.
Además del idioma, que es un factor muy importante al momento de adaptarse a otro país, los efectos de la conquista y colonización hicieron que los suramericanos adoptaran muchos elementos de la cultura española. A la vez, nuestra cultura también recibió influencias de las costumbres americanas. Por esta razón, los emigrantes pueden adaptarse con mayor facilidad a un entorno español que al de cualquier otro país europeo.
Además de esto, las leyes en España hacen que sea muy fácil invertir, comprar inmuebles o incluso crear compañías productivas siendo extranjero. Por esta razón, muchos inversionistas y empresarios apuestan por España como su destino.