La madera ha estado presente en toda la historia de la humanidad y más aún durante el desarrollo de la civilización. En la prehistoria las cabañas eran de palos de madera, además tenía muchos usos, por ejemplo, en las hogueras para la preparación de alimentos en los tiempos del cromañón.
La aplicación de este material se ha diversificado enormemente a tal punto que hay quienes hablan hoy en día de la revolución en la construcción con madera, ya que es uno de los materiales que ahora más se utiliza en este sector por sus ventajas.
Esta “revolución” ha llegado a tal punto que ya se han construido rascacielos de madera. Sí, se trata de altos edificios fabricados con madera, material que se ha unido con las bondades de la inteligencia artificial para crear estas estructuras respetuosas con el medio ambiente, que nada tienen que envidiarle a las de acero y hormigón, materiales que poco a poco han ido siendo desplazados.
Los edificios fabricados con madera evitan las emisiones de CO2 que se producen en la construcción, a la par ofrecen una estética y belleza espectaculares.
Un ejemplo reciente de lo que es el uso de la madera en la construcción es el centro de gimnasia Ariake utilizado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. La fachada y la estructura en general están construidas en madera, incluso, los asientos de los visitantes.
Al uso de madera como una acción muy importante para el cuidado del planeta, se suma que estas modernas estructuras están dotadas por lo general de fuentes de energía renovables y tecnologías avanzadas para su mantenimiento y funcionamiento, lo que reduce sustancialmente el gasto energético.
Como es de suponer, los rascacielos desde siempre se han calificado como monstruos contaminantes por todo lo que implica los sistemas de iluminación y climatización, ascensores, entre otros, lo que supone el uso de combustibles.
Los edificios de madera, que se corresponden a una concepción ecológica, se plantean el uso de baterías, paneles solares, bombas de calor, incluso sistemas rociadores con base en energías renovables, todo orientado a evitar el coste ambiental.
La calidad del material es importante
Una vez que se ha decidido que el material predominante en una construcción de cualquier tipo de estructura es la madera, obligatoriamente hay que elegir el material de la mejor calidad, para que el proyecto pueda tener el resultado esperado.
Un almacén de maderas en Valencia que sea de trayectoria y referencia a nivel nacional, es una excelente opción para que sea el proveedor. Entre los productos que se pueden conseguir en tiendas especializadas están: listones y tableros de madera, vigas laminadas, pérgolas de madera y tarimas flotantes de madera IPE.
Además, se pueden encontrar vigas de madera para exterior de pino sueco tratado y cepillado, parquet sintético con juntas invisibles que no necesita cola para aplicarlo, suelos de madera en general, techos de madera, panel sándwich, celosías de madera, así como otros artículos en madera necesarios en el equipamiento: mobiliario, herrajes, revestimiento para puertas, escaleras y peldaños de madera, platos de ducha, tornillos de madera, y además todo tipo de tratamiento para este material.
Las múltiples ventajas de la madera
La utilización cada vez más creciente de la madera en el sector de la construcción viene dado por sus múltiples ventajas. En primer lugar es el hecho de ser un material de origen natural y renovable, es decir, sigue disponible en la naturaleza después de miles de años de uso, obviamente mientras su consumo sea responsable y se dé la consecuente tarea de reforestación de los bosques.
El uso de la madera, también siempre y cuando se dé con responsabilidad, es respetuoso con el medio ambiente y va a generar una disminución sustancial de la contaminación y el consumo energético.
De igual manera, hay que decir que la madera es un aislante natural excelente. Es un material que concentra muchas zonas de calor, como resultado de su estructura porosa, lo que permite fabricar estructuras con consumo energético bajo y espesor reducido.
Con respecto al cemento, la madera tiene una capacidad de aislamiento 10 veces mayor que el cemento, esto le confiere características térmicas ideales para crear agradables ambientes tanto en invierno, como en verano, sin que se necesite nada más.
Contrariamente a la idea de que la madera es combustible, suficientes pruebas a lo largo de los años han comprobado que este material es resistente al fuego, además de mostrar un comportamiento predecible durante el desarrollo de un incendio.
Cuando se produce un incendio generalizado, la madera se carboniza generando una barrera de protección que frena las llamas, evitando su propagación al interior.
Una ventaja también de su uso en la construcción es que hace reducir los tiempos, ya que no necesita proceso de secado después de su instalación, a diferencia de otros materiales como el hormigón. Esto permite un sustancial ahorro también en costes.
Es importante mencionar dos atributos muy importantes que tiene la madera, que son la resistencia y la durabilidad. Es un material resistente a una gran cantidad de sustancias químicas, además puede resistir esfuerzos de tracción y presión debido a su baja densidad y masa, así como por su alta resistencia mecánica.
Otra de sus características favorables es su versatilidad. A pesar de ser un material que se usa desde los tiempos remotos, esto no significa que no haya evolucionado y ahora se adapte a las nuevas tendencias y requerimientos del mundo moderno; de hecho es tan versátil que puede llegar a ajustarse a cualquier proyecto de diseño y estilo.
La madera ofrece una amplia diversidad de opciones en lo que respecta a colores, texturas y formas, incluso, otorga a los espacios confort y modernidad, más aún si se combina con otros materiales como el mármol.
Un aspecto que no se puede dejar de mencionar es la belleza que aporta a los ambientes, dándole un toque de naturalidad que hace más acogedores los espacios.