Una medida de stress es necesaria para inyectarnos la energía que requerimos al realizar nuestras actividades diarias, de lo contrario no contaremos con la motivación correcta para ser proactivos. Sin embargo, muchas veces sentimos que el stress y la ansiedad tienen secuestrada cada actividad diaria que realizamos. En este post te traemos las mejores técnicas para relajarte rápidamente sin muchas complicaciones; estas las podrás aplicar en cualquier momento y circunstancia.
Nuestro cuerpo es una máquina perfecta, el sistema endocrino y el cerebro actúan en conjunto para proporcionar la energía requerida en los momentos de acción necesarios y de esta forma enfrentamos los desafíos de forma exitosa. Ahora bien, si dejamos que las actividades, responsabilidades y compromisos diarios nos sobrepasen, no establecemos prioridades, no somos conscientes de nuestras fortalezas y limitaciones, el estrés y la ansiedad nos perturbarán siempre.
Comprender que significa relajarse es el primer paso, estar relajados es tener la mente y el cuerpo en calma. El proceso de relajación comienza cuando nuestra mente se relaja y tranquiliza de una manera saludable. Esta relajación va produciendo una distensión en nuestros músculos que permite que nuestro cuerpo reaccione favorablemente y así se propicia un estado de tranquilidad. Como existen muchas técnicas para relajarte, busca las que te sean más efectivas y beneficiate; aquí te mostraremos 2 técnicas que pueden empezar a aplicar ya mismo.
Respiración óptima y profunda como técnica para relajarte
Esta técnica es rápida y sencilla, ideal para la época desenfrenada que nos toca vivir. Una adecuada respiración logra propiciar en nuestra mente y cuerpo respuestas adecuadas para que el stress y la ansiedad se reduzcan. Observa y cambia tu respiración para que logres relajarte de forma eficaz. Dependiendo del lugar puedes acostarte o sentarte para realizar la técnica.
Acuéstate boca arriba y de forma recta en una superficie plana o siéntate con tus muslos unidos y un ángulo de 90° entre tu torso y los muslos. Pon una mano abierta sobre tu pecho y la otra igual sobre tu vientre; céntrate por unos segundos en la forma en que respiras mueve ambas zonas. Si la mano de tu pecho se eleva más que la de tu abdomen tu respiración es superficial y carente de una buena cantidad y calidad de oxigeno.
A continuación y de forma consciente por 5 minutos respira de forma que la mano sobre tu vientre se mueva, mientras la otra no. Para lograrlo inspira por la nariz de forma profunda por 5 segundos, retén la respiración 3 segundos y exhala por la boca todo el aire contenido durante 5 segundos más.
Imágenes mentales positivas como técnica para relajarte rápidamente
Esta técnica combina la respiración óptima y centrar la atención de tu mente en una imagen positiva de tu elección. Puedes colocar como fondo música suave y relajante o sonidos naturales como la lluvia o el canto de aves.
El primer minuto realiza la respiración óptima, poco a poco lleva tu mente a imaginar un lugar tranquilo, pacífico, relajado como un bosque, una playa, lo que gustes. Incluye diversos detalles para que tu mente se concentre en este escenario mental y sigue practicando la respiración. Debes involucrarte mental y físicamente en este entorno, imagina el olor del lugar, los sonidos, los colores, las formas. Detalla lo que te gusta y actúa mentalmente como si estuvieras allí.
Luego de unos minutos ve lentamente desapareciendo esta imagen de tu mente y enfócate nuevamente en la respiración óptima. Cuando la imagen ya no esté abre los ojos para finalizar.
Otra sugerencia para relajarte rápidamente
Las 2 técnicas anteriores te ayudan a relajar tu mente y por extensión tu cuerpo. Además, realizar a diario una actividad que te agrade como caminar u otro ejercicio, escuchar música, cantar o darte un masaje en la espalda o pies influirá mucho en tu relajación corporal. Ahora que ya lo sabes, cuéntanos si te sabes algunas otras técnicas para relajarte rápidamente que te han sido útiles o a tus amigos.