Armenia y Azerbaiyán se acusaron ayer de violar un alto el fuego humanitario acordado hace cuatro días para contener el conflicto en Nagorno-Karabaj que se cobró cientos de vidas en las últimas dos semanas.
Funcionarios de la etnia armenia en Nagorno-Karabaj dijeron que el número total de soldados muertos fue 542, 17 más que el lunes, cuando los informes de nuevos combates provocaron llamamientos de Rusia y miembros de la Unión Europea para respetar la tregua.
Azerbaiyán dijo que 42 civiles azeríes han muerto y 206 han resultado heridos desde el 27 de septiembre. El país no reveló bajas militares.
Nagorno-Karabaj es reconocida internacionalmente como parte de Azerbaiyán, pero está gobernada y poblada por personas de etnia armenia.
El alto el fuego mediado por Rusia el sábado pasado tenía como objetivo permitir que las fuerzas étnicas armenias y azerbaiyanas intercambiaran prisioneros y cuerpos de los muertos en los combates más mortíferos en Nagorno-Karabaj en más de 25 años.
La tregua pareció suavizarse aún más ayer, cuando el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán dijo que las fuerzas armenias estaban bombardeando los territorios azerbaiyanos de Goranboy, Tarter y Aghdam, “violando gravemente la tregua humanitaria”.
Un equipo de televisión de Reuters en Tarter dijo que el centro de la ciudad estaba siendo bombardeado. “Las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán no están violando el alto el fuego humanitario”, dijo el portavoz del Ministerio de Defensa, Vagif Dargiahly.
El portavoz del Ministerio de Defensa de Armenia, Shushan Stepanyan, negó los cargos.
Dijo que la parte azerí reanudó las operaciones después de una pausa nocturna, “apoyada por fuego de artillería activo en las direcciones sur, norte, noreste y este”.
Reuters no pudo verificar de forma independiente estos informes de fuego de artillería.
El conflicto está siendo monitoreado en el extranjero porque está cerca de los gasoductos y oleoductos de Azerbaiyán hacia Europa, y Turquía y Rusia están en peligro de ser arrastrados. Rusia tiene un pacto de defensa con Armenia, mientras que Turquía es un aliado de Azerbaiyán.
Turquía aún no está involucrada en la mediación, que ha sido liderada por Francia, Rusia y Estados Unidos durante años.
Ankara apoya la ofensiva de Azerbaiyán para “recuperar sus tierras ocupadas”.