Las plantas y hierbas medicinales o curativas son aquellas que permiten tratar determinadas dolencias a través de sus propiedades o mecanismos de acción, remontándose su uso a hace miles de años. A continuación, se presenta una lista con algunas de las plantas con propiedades medicinales más conocidas:
Melena de león
La melena de león (Hericium erinaceus) es un hongo caracterizado por su riqueza en minerales, antioxidantes y beta-glucano. Cuenta con grandes propiedades regenerativas capaces de reconstituir la mucosa gastrointestinal (al actuar como prebiótico y fuente de fibra) e incluso las vainas de mielina, que recubren las células nerviosas. Asimismo, contribuye a reducir la retención de líquido y prevenir la incidencia de infecciones y enfermedades inducidas por agentes patógenos.
El tiempo mínimo para lograr efectos terapéuticos es de 45 a 60 días, asociándose sus beneficios para la salud a la sinergia producida por la interacción entre principios activos. Esto último ha sido demostrado por medio de modelos animales y ensayos clínicos a pequeña escala, habiéndose observado sus efectos sobre la función cerebral al beneficiar a los adultos mayores con deterioro cognitivo leve, propiciando, además, una protección contra los problemas de memoria causados por la acumulación de beta amioloide (sustancia asociada a la enfermedad de Alzheimer).
La melena de león puede ayudar, también, a aliviar la depresión y la ansiedad, observándose menor irritabilidad y ansia y mayor capacidad de concentración. Además de mostrarse prometedora en la protección contra el cáncer, pudiendo ayudar a eliminar las células de leucemia. Se observó cómo el extracto de este hongo ayudó a reducir el tamaño de los tumores de colon cancerosos en ratones al influir sobre células involucradas en la respuesta inmune.
Destacar, además, su uso en el tratamiento de colesterol alto, inflamación, enfermedad de Parkinson y úlceras.
Menta
La menta (Mentha) es una planta medicinal que se puede utilizar fresca o seca, tanto para fines gastronómicos como medicinales, ya que tiene una de las capacidades antioxidantes más altas. Sus aceites derivados sirven, asimismo, para la elaboración de productos de belleza y de higiene personal.
Entre los beneficios de la menta como planta medicinal merecen ser mencionados sus efectos para paliar los síntomas del Síndrome del Intestino Irritable, aliviar los problemas digestivos, mejorar la función cerebral, propiciar una mejor respiración en casos de gripe o resfriados y prevenir o aliviar el dolor de cabeza.
Otros usos serían la administración tópica, para calmar y enfriar la piel, y la administración oral, ya que beber té de hierbas y masticar hojas frescas ha mostrado matar las bacterias que se alojan en la cavidad bucal gracias a los efectos antibacterianos del aceite de menta.
Malva
Entre las propiedades curativas de la malva (Malva sylvestris) se encontrarían su capacidad de acelerar la curación de heridas y proteger contra infecciones al estimular el sistema inmunológico; reducir la inflamación e hinchazón causada por picaduras de insectos, moretones, quemaduras solares o erupciones en la piel; reducir los signos de envejecimiento; mejorar la salud respiratoria; optimizar las funciones digestivas mediante su efecto laxante; mejorar el sueño y tratar dolores de cabeza a través de su actividad analgésica.
Valeriana
La valeriana (Valeriana officinalis) es una planta medicinal cuyo extracto mejora la calidad del sueño por medio de efectos sedantes.
Resulta de gran utilidad para reducir la ansiedad, paliar el dolor, relajar los músculos y reducir la presión arterial alta.
Salvia
La salvia (Salvia officinalis), cuyos beneficios para la salud se derivan del ácido rosmarínico, también presente en el romero, se caracteriza por mejorar la función cerebral, disminuir la inflamación, prevenir enfermedades crónicas, estimular el sistema inmunológico, regular la digestión, aliviar las condiciones de la piel, fortalecer los huesos, retardar la aparición de trastornos cognitivos y prevenir la diabetes.
Como conclusión, se puede afirmar que el buen uso de las plantas curativas favorece una mejor salud y calidad de vida al actuar como medicina alternativa o como complemento a la medicina tradicional. Es por esto que resulta de gran importancia conocerlas, estudiarlas y aprovechar sus propiedades.
