En el mundo de la moda hay cosas que causan furor y muchas corren a usarlo sin evaluar los pros y los contras. El cuidado de las uñas no escapa a este furor. Últimamente está de moda el uso del esmalte permanente de uñas. En este post, de un modo honesto, te explicaremos en qué consiste el esmalte permanente, los pro y los contra y cómo debes quitarlo. ¡Entremos en materia!
Qué es el esmalte permanente de uñas
Este esmalte tiene en su composición acrilatos y formaldehido (este último también está presente en los esmaltes tradicionales); cuya aplicación empieza puliendo la superficie de la uña eliminando así la capa más dura de la uña. Luego se aplica una primera capa, se pasa las uñas por luz ultravioleta, se pone una segunda capa, se pasa a la luz ultravioleta y finalmente se pone una capa de brillo permanente y se vuelve a fijar con la luz ultravioleta.
Sin embargo, una de las desventajas o los contras que tiene el esmalte permanente de uñas, es que según los dermatólogos, las sustancias del esmaltado permanente son nocivas para la salud de las uñas y de la piel circundante. Si tus uñas están débiles, no es recomendable que te apliques el esmalte permanente, pues las debilitarías aún más.
La gran ventaja de esta técnica es que puede permanecer en tus uñas 2 a 3 semanas con una buena apariencia. Expertos aconsejan que cumplidas las 2 semanas, acudas al salón a que te lo quiten; ya que a partir de allí las puntas se desgastan y por allí puede colarse la humedad y junto con ella los hongos.
Pero no permitas NUNCA que te lo retiren con el torno ya que, aunque es lo más rápido, es lo máximo en agresión para tus uñas. El torno es para eliminar uñas acrílicas o de gel. Pero a continuación hablaremos más detalladamente sobre esto.
¿Cómo debe quitarse este esmalte?
La acetona normal no sirve para quitar este esmalte. Debe quitarse con acetona pura o con el líquido especial para hacerlo. Cada marca de esmalte permanente tiene el líquido apropiado para quitarlo.
Además de la acetona pura o el líquido especial para quitar el esmalte permanente, debes tener papel de aluminio o dedales especiales para esta labor; y suficiente algodón para envolver cada uña, repujador especial para eliminar esmalte permanente, lima gruesa, un palito de naranja y aceite especial para hidratar tus uñas y cutícula.
Comienza por lavar muy bien tus manos y tus uñas. Seca y lima la capa superior del esmalte; así podrá penetrar más fácilmente el líquido que emplees para quitar el esmalte.
Empapa cada algodón con el líquido que quitará el esmalte en cuestión y colócalo sobre cada uña. Envuelve cada dedo con papel de aluminio y coloca el dedal, ten cuidado para que no se mueva el algodón que debe cubrir totalmente la uña. Deja actuar por 10 minutos.
Pasado este tiempo, con el repujador retira con cuidado el esmalte y luego; con el palito de naranja retira lo que haya quedado por las orillas próximas a la cutícula.
Lava tus manos y aplica el aceite hidratante y dale un buen masaje a tus uñas y cutículas. Hidrata todos los días y varias veces al día con este aceite. Tus uñas te lo agradecerán. Deja descansar tus uñas unos 2 meses para que se recuperen antes de volver a aplicarte el esmalte permanente.
Esperamos que con estos consejos puedas disfrutar de usar el esmalte permanente y de quitártelo en el salón de belleza o en casa con las debidas precauciones que te acabamos de mencionar.