El Jabón, como muchos otros productos, ha sufrido muchas modificaciones como consecuencia de la industrialización de los procesos productivos artesanales. Como resultado, las antiguas recetas de fabricación se han ido perdiendo; es por eso que en este post no hablaremos sobre cómo hacer los jabones que compramos en los supermercados; sino más bien jabones naturales con ceniza, tal como lo hacían hace mucho tiempo.
El Origen de los Jabones Naturales con Ceniza
Los fenicios lo fabricaban con aceite de oliva y soda cáustica (o carbonato de sodio); esta última la obtenían a partir de las cenizas de la combustión de plantas halófitos (plantas que crecen en suelos donde la concentración de sal es bastante elevada) como la salicornia.
Recetas parecidas se seguirían utilizando en Siria. El jabón sirio, procedente de la ciudad de Alepo, antiguo territorio fenicio, se sigue fabricando hoy día con el mismo método tradicional y con aceite de oliva y aceite de laurel.
Recolección de los Materiales para hacer Jabones Naturales con Ceniza
Para hacer jabones naturales con ceniza, necesitas obviamente, ceniza; pero esta debe ser lo más blanca posible. Esta ceniza se obtiene quemando la madera en un fuego bastante intenso. Seguidamente debes cernirla con un cernidor de arenas; esto con la intención de eliminar de nuestra materia prima cualquier rastro de madera aun por consumir, piedras, etc.
Otro agregado importante que has de conseguir es el agua; evita usar agua de pozo, pues esta contiene componentes que pueden dañar nuestro producto. El agua perfecta que puedes usar, es la de lluvia y del aire acondicionado, por todo el proceso que ha realizado de condensación. El agua de grifo también puedes usarla, pero te recomiendo que la dejes reposar por los menos 2 días antes de realizar el proceso de fabricación, pues el cloro puede interferir. También debemos juntar, aceite vegetal, nuevo o usado, no hay problema cuál de los dos uses.
Procedimiento para hacer Jabones Naturales con Ceniza
Juntar y Batir
Ahora que tenemos todos los materiales, debemos arrojar el agua en la ceniza; no al contrario porque puedes levantar mucho polvo de ceniza y desperdiciar material. Seguidamente mezcla con una vara, dando vueltas continuamente hasta que veas que se ha mezclado bien. A continuación, observa que la ceniza se ha disuelto y procede a quitar un material de color negro, que nada te sirve para el proceso. Este material es buenísimo para la tierra, si tienes un huerto o unas plantas, puedes tirarlo en la tierra, esto hará mucho bien a las plantas.
Ahora que has mezclado todo y retirado el material negro no deseado, deja reposar ese líquido negro toda la noche; al día siguiente vuelve a dar vuelta a la mezcla y luego déjalo descansar toda la noche; este proceso lo vas a repetir por 5 días por lo menos.
Filtrado de Sedimentos
Ahora que tienes listo tu material para la elaboración del jabón, debes proceder a filtrarlo con una tela. Para hacer este proceso necesitas otro recipiente, más o menos de la misma capacidad, si es más grande mejor.
Coloca la tela en la boca del nuevo recipiente y echa encima el material que hemos estado preparando; de esta manera quedará en el trapo todo el sedimento que necesitamos desechar. Puedes facilitarte el proceso con un colador y la tela juntos, de esta manera no se te corre la tela por los bordes del recipiente.
Retiro del Material
Ahora que tienes el material listo, puedes ir retirando el líquido marrón oscuro del recipiente, poco a poco sin alborotar el agua; colócalo en otro recipiente, de vidrio preferiblemente. Al culminar, déjalo reposar para que más sedimento se deposite en el fondo. Este material es comúnmente llamado soda cáustica, es peligroso que entre en los ojos, así que aléjalo de los niños y procura usar guantes cuando estemos haciendo los siguientes pasos.
Saponificación
Ahora que tenemos todo listo, podemos iniciar el proceso de saponificación, el cual se realiza evaporando el agua del producto que acabamos de hacer. Para esto necesitas una olla, de hierro preferiblemente y calentar el material revolviendo mientras lo haces. El resultado que debes esperar es que se reduzca casi a la mitad; así que, si tienes 1 litro de material, deberías quedar con poco más de ½ lito.
Ahora que tienes este material en la olla y a demás hirviendo, empieza a agregar el aceite, en medida debe ser 300 gr. Ahora que has agregado el aceite mezcla y calienta todo junto hasta que hierva de nuevo. Sigue el proceso de calentado hasta que se vuelva una pasta. Cuando veas que se convirtió en pasta, deja enfriar y fíjate que tomó una consistencia espesa de color marrón oscuro; a medida que se enfría se va tornando más duro, así que, si tienes unos moldes donde agregar la mezcla, es hora de buscarlo para que tomen la forma que desees.
Ya Tenemos Nuestros Jabones Naturales con Ceniza
Y de esta forma ya tienes tus propios jabones naturales con ceniza, hechos en casa y que te sirven para limpiar cualquier superficie. Puede que al principio no te agrade mucho la forma o la textura que tome la mezcla, pero puedes ir probando, a partir de estos consejos, agregar más o menos cenizas, dejar secar más tiempo la mezcla, etc., hasta que hagas un jabón que satisfaga tus gustos. Esta técnica también la puedes combinar con olores o fragancias para que te sea mucho más agradable.
Si quieres conocer cómo hacer otros tipos de jabones naturales, seguro que nuestro artículo dedicado a ese tema te encantará.