La vaselina es una sustancia derivada del petróleo, cuya estructura es variable de acuerdo al tipo utilizado y del refinamiento aplicado; es de color cristalina, sin olor y de contextura densa. Y es utilizada en muchos campos de la salud y belleza. Sin embargo, puede haber algunas contraindicaciones de la vaselina, y en este artículo te nombraremos cuáles son.
Tipos de vaselina
La vaselina blanca o muy refinada es comúnmente empleada en el área cosmética y farmacéutica. En tanto que la menos refinada o petrolato, cuyo aspecto es marrón, ámbar o amarillento; es utilizada en el ámbito industrial únicamente. Dentro de sus propiedades relevantes esta el ser emoliente o calmante, su impermeabilidad (pues no se disuelve con el agua), adhesividad (permanece sobre la piel) y oclusiva.
En este sentido, la vaselina favorece el proceso de cicatrización, mejora la piel irritada y reseca; así como suaviza zonas engrosadas de la piel o con costras; siendo también de efecto exfoliante. La vaselina es un ingrediente que se encuentra en innumerables productos tanto médicos, como cosméticos. Tales como: ungüentos, cremas, barras y protectores labiales; ciertos artículos para el cuidado del bebe, como lubricante en apósitos estériles y sondas de Foley, entre otros.
No obstante, existen también razones que se contraponen al uso de la vaselina; lo cual resulta paradójico al ver que ofrece notables beneficios. Siendo una de las tantas contraindicaciones de la vaselina, el hecho de que no hidrata la piel; pues gracias a su propiedad adhesiva y oclusiva, permanece sobre la piel a modo de protección para que no salga la humedad. Es por ello, que antes de aplicarla se sugiere hacerlo luego de colocar una loción o crema hidratante en la zona.
No es beneficioso su uso en pieles de tendencia grasosa; ya que por su acción de formar una película protectora sobre la piel; ocasionaría obstrucción en los poros; y por ende favorece aparición de acné u otras alteraciones cutáneas, que terminan siendo desagradables.
Otras contraindicaciones de la vaselina
Debido a que la vaselina proviene de hidrogenados del petróleo, antes de su refinamiento puede contener agentes dañinos al ser humano; de allí, que existan posturas contradictorias sobre alguna tendencia cancerígena; los cuales son erradicados gracias a los procesos de refinamiento para su desinfección, quedando apta para el uso en la piel.
Otra razón en contra, para el uso de la vaselina es que incrementa la sensibilidad de la piel ante los rayos ultravioleta; pudiendo incluso generar quemaduras e irritaciones graves en la piel. Por esto, no es para nada recomendable para personas que sufran alguna afección en la piel de tipo inflamatorio.
Según estudios dermatológicos, la vaselina solo le ofrece a la piel un efecto de película protectora, a modo de lubricante. Esto es, debido a su insolubilidad en el agua; lo cual es dificultoso para retirar el residuo que esta deja, y por ende limita la respiración y humectación de la piel.
Aunque no es usual, existe un riesgo menor de que alguna persona experimente alergia a alguno de los componentes en la vaselina; como es el caso de picazón, enrojecimiento o ardor luego de su uso. En este caso, simplemente no se debe usar más el producto y consultar al especialista.
Como la vaselina posee diversos derivados del petróleo; y conociendo las desventajas al usarla, es conveniente que se verifique la etiqueta al comprar maquillaje y/o demás productos que se utilicen en la piel, y que contengan aceites vegetales y naturales preferiblemente; estos garantizan una mejor protección de la dermis. Quizás puedan ser algo costosos, pero la salud de la piel bien lo vale; pues el uso de la vaselina y sus derivados, a la larga favorece la degeneración de la piel más rápidamente.