Es evidente que el sector industrial juega un papel muy importante en la economía de los países, si bien, dependiente del tipo de industria de la que se trate, así los beneficios pueden ser aún mayores, sobre todo, de cara al consumidor.
En la actualidad, en prácticamente todos los países, el sector empresarial está compuesto, en buena parte, por diversas industrias. En este sentido, son muchos los tipos que se pueden encontrar y cada uno de ellos, aporta de una manera u otra, beneficios a la economía de una región.
Últimamente, se está hablando mucho más de la industria liviana, también conocida como ligera. Para saber que es la industria ligera, lo primero que hay que decir es que se trata de un tipo de industria que centra su actividad, principalmente, orientándose hacia el consumidor.
Es decir, todas aquellas industrias que se enmarcan dentro de esta categoría ofrecen actividades económicas para el consumidor final, sabiendo que, además, suelen obtener bienes de consumo que son muy útiles para este tipo de usuarios.
Hoy en día, en España hay un gran número de empresas que están dentro de la categoría de industria ligera, siendo las áreas de trabajo más comunes los aparatos electrónicos, la industria de la alimentación, los textiles, las bebidas, aquellas que trabajan con productos farmacéuticos o las compañías de fabricación y embotellado, entre otras.
¿Cuál es el principal objetivo de este tipo de industria?
Como ya se ha mencionado anteriormente, la industria ligera tiene como público final el consumidor, precisamente por este motivo, su objetivo principal es producir bienes, tanto de consumo como de uso, que, para su fabricación, se utilizan todo tipo de materiales procesados, con el fin de satisfacer las necesidades que presenten los consumidores finales.
¿Qué características destacar de la industria ligera?
Entre las características específicas que presenta la industria ligera, hay que decir que el uso de capital en la actividad manufacturera es mucho menos intensivo. También es importante destacar que este tipo de industria no necesita demasiadas inversiones en materiales o tecnologías, además de que, normalmente, se sitúan en zonas urbanas.
Para dar este servicio y desarrollar su actividad, suelen utilizar productos semielaborados o materias primas, sin necesitar demasiada maquinaria. Por supuesto, la industria ligera no tiene tanto impacto medioambiental, fabricando productos que se utilizan y consumen rápidamente en el día a día.
¿Por qué es importante la industria ligera?
Dentro de todas las categorías de industria que hay, la ligera es una de las que aporta mayores beneficios a la economía, entre otras cosas, porque ofrece productos, bienes y servicios básicos para los ciudadanos, además de tener un gran peso en la importación.
Todo esto conlleva a generar mayor riqueza en el país, a lo que se añade el empleo, lo que se traduce en el incremento de la economía nacional, y el impacto positivo en otros sectores como el social o el cultural.
Sin duda alguna, uno de los beneficios más importantes de la industria ligera en la economía es la generación de empleo, siendo, en muchos casos, un motor laboral esencial, sobre todo, en los momentos de crisis, representando un papel de gran importancia.
De igual modo, esta industria ayuda a mejorar la calidad de vida de las personas, lo que conlleva también a la mejoría financiera en todos los niveles, puesto que se crean más oportunidades en todos los sentidos.
Asimismo, la industria ligera es un sector en constante progreso, sabiendo que está abierta a la innovación y al desarrollo tecnológico, dos pilares esenciales que mueven bastante la economía de un país.
Finalmente, hay que decir que este tipo de industria también colabora en reducir las desigualdades sociales o por regiones, ya que la instalación de estos negocios en ciertas zonas hace que aumente su desarrollo, teniendo en cuenta que se integran a la perfección en las zonas urbanas y residenciales y, por ende, forman parte de la sociedad en general.