La receta de hoy es exquisita, nutritiva y muy reconfortante. Es una receta tradicional de la gastronomía española, y un plato de consumo frecuente durante los días de semana santa. El potaje de vigilia tradicional de cuece en pote de hierro u olla de barro y es una preparación que aporta mucha proteína gracias a que uno de sus ingredientes es el bacalao en salazón. Así que, toma nota del paso a paso y prepara tu potaje de vigilia, exquisita receta para semana santa.
El potaje de vigilia se elabora con garbanzos, trozos de bacalao desalado, espinaca y otros ingredientes. Se acostumbra acompañar y decorar este plato con huevos duros cortados en cuartos y un poco de perejil finamente picado. En fin, una delicia que apetece en los actuales momentos por ser un plato reconfortante, nutritivo y muy oportuno para que nuestro organismo mantenga su energía y defensas elevadas ante la lucha diaria contra el COVID-19.
Receta de potaje de vigilia
Algo fundamental para preparar este rico potaje de vigilia, es poner un día antes el bacalao a desalar; remojándolo en agua y cambiando varias veces el agua de remojo. Además, si utilizas garbanzos secos deben remojase -antes de la preparación- toda la noche en agua tibia con sal.
Ingredientes
300g de bacalao desalado
300g de garbanzos secos
3oog de espinacas frescas
1 hoja de laurel
2 cebollas medianas
4 dientes grandes de ajo
1 cucharadita de pimentón agridulce
1 huevo grande
Aceite de oliva extra virgen
Preparación
Escurre y enjuaga bien los garbanzos, si quieres elaborar la receta en menos tiempo cuécelos en una olla express con 1 litro de agua de 15 a 20 minutos. Sino, coloca los garbanzos escurridos y enjuagados en una olla con 1 litro de agua, 1 cebolla, 2 dientes de ajo sin concha, el laurel y cocina por 1 hora y media a fuego medio o hasta conseguir la suavidad deseada. En otra olla con agua que lo cubra cocina el huevo de 8 a 10 minutos.
A continuación prepara un sofrito añadiendo a una sartén un chorrillo de aceite, calienta a fuego medio-alto y agrega la otra cebolla cortada en brunoise y los 2 ajos restantes majados. Deja cocinar y dorar ligeramente, revuelve ocasionalmente, luego baja el fuego y añade el pimentón. Remueve un instante para integrar todos los sabores evitando quemar el pimentón. Retira del fuego.
Cuando los garbanzos estén suaves retirarles un poco de caldo –de ser necesario- luego agrega el sofrito, remueve suavemente para no deshacer los garbanzos en exceso. Añade las espinacas limpias, secas y troceadas; si son muchas incorpóralas de a poco hasta que reduzcan su volumen, revuelve y deja cocinar 5 minutos. Escurre el bacalao, retírale la piel, trocéalo y agrega a la cocción. Bajar el fuego, remueve de forma circular por unos minutos para mezclar todo bien.
Rectifica la sazón, ajusta de ser necesario, retira el laurel y apaga. Finalmente sirve bien caliente agregando a cada porción un cuarto de huevo duro, un toque de perejil o cilantro a gusto y acompaña con una buena ración de pan casero. Y buen apetito.
Sugerencias adicionales para preparar potaje de vigilia
Se puede utilizar garbanzos en conserva; los cuales se deben escurrir, lavar suficientemente y añadir junto con las espinacas para que no se deshagan completamente y absorban todos los sabores.
Si no tienes espinacas puedes usar acelgas y también quedará muy rico. Sólo recuerda que el tiempo de cocción del tallo de la acelga es más largo que el de las espinacas. Así que inclúyelas en la preparación un poco antes.
